Con el paso inevitable del tiempo es de esperarse que todas las cosas del entorno deportivo mejoren, que se realicen de mejor forma y en condiciones cada vez más favorables; lamentablemente en el béisbol amateur de la Comarca Lagunera sucede todo lo contrario, la actividad prácticamente es nula, a los campeonatos nacionales sólo acuden las categorías de veteranos, mientras que los juveniles y nuevos valores han dejado de representar a La Laguna en los diferentes campeonatos nacionales que organiza a lo largo del año, la Federación Mexicana de Beisbol (FEMEBE). La Liga Mayor de La Laguna agoniza y los pequeños que se preparan en las escuelas infantiles no tienen donde seguir su formación como peloteros.
Sentarse a charlar de béisbol con Raúl Héctor Parra Monsiváis, es remontarse a muchos años atrás, abrir el arcón de los recuerdos, cuando La Laguna tenía gran presencia en los campeonatos nacionales de todas las categorías o cuando la Liga Mayor se realizaba hasta con diez equipos, con muy buenas asistencias en todos los escenarios. Es cierto que la situación económica hoy es muy complicada, pero también es cierto que actualmente escasean las personas que de corazón y por verdadero amor al béisbol, sacan un peso de su bolsa para colaborar. Los jugadores laguneros hoy tienen que unirse a Coahuila o Durango, porque La Laguna ha dejado de existir.
Raúl Héctor Parra Monsiváis asegura con razón, que el Torneo de Nuevos Valores debe celebrarse; había intención de la Asociación Lagunera de Beisbol de invitarlo a participar, pero de última hora ese organismo cambió los planes y el torneo no parece tener futuro; se involucró a Juan Manuel Pérez Medina pero las buenas intenciones se esfumaron. Señala el ex directivo que los campeonatos nacionales siguen, pero en muy pocos participa La Laguna. De ahí salieron Fernando “He-Man” Rodríguez, Federico Castañeda y Alan Guerrero, por mencionar sólo a tres laguneros que llegaron a la Liga Mexicana de Beisbol.
Sin ningún apoyo oficial en aquellos años se creó la Escuela Instruccional de Beisbol; Raúl Parra era el coordinador y había tres instructores; Antonio Moreno, Víctor Orozco y Francisco “Chino” Galindo, los dos últimos ya fallecidos. Con recursos propios Parra Monsiváis llegaba a todos los rincones de La Laguna a brindar la enseñanza a los pequeños; los Cuauhtémoc y Humberto Rocha fueron proyectados, al igual que Adolfo “Panameño” Hernández, México competía en campeonatos mundiales con algunos laguneros, como Cuauhtémoc Rocha, al que le tocó ir a Canadá; no había ayuda oficial, pero La Laguna y su béisbol estaban presentes.
Federico Castañeda participó en un Campeonato Nacional de Primera Fuerza en Chihuahua y resultó el pitcher campeón, “Lico” apenas tenía la edad de Nuevos Valores, pero sus condiciones lo llevaron a una competencia de mayores, en la cual resultó el mejor; de ahí dio el brinco al profesionalismo, al cual llegó con los Algodoneros de Unión Laguna. Fernando “He-Man” Rodríguez también recibió el apoyo y lo aprovechó; no es fácil ser Novato del Año en la Liga Mexicana de Beisbol y después ser el mejor productor de carreras con los Piratas de Campeche, en donde había cañoneros extranjeros de la talla de Scott Bullett.
La Laguna es todavía tierra de grandes talentos del béisbol, pero ¿qué está fallando? Hoy no se va a los ranchos o a los ejidos a buscar a su casa a los jugadores, como lo hacía Francisco “Chino” Galindo; hoy nuestra región es tierra fértil para equipos foráneos que se llevan a los mejores prospectos, como sucedió con Manuel Bañuelos, hoy con Medias Blancas de Chicago, pero a través de los Sultanes de Monterrey, como también sucedió con Alan Guerrero o Ricardo Serrano y muchos otros que no interesaron al equipo profesional en turno. La Asociación Lagunera de Beisbol y quienes verdaderamente aman al Rey de los Deportes, tienen la palabra.
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