/ jueves 5 de septiembre de 2024

Río Babel | Una última ocurrencia como legado

¿Qué título le pondría usted al final del sexenio de AMLO? Se lo pregunto porque estamos teniendo un final caótico. Las elecciones no terminaron con la polarización, por el contrario, el debate de la reforma judicial ha incrementado las posturas encontradas.

A la discusión se han sumado nuevos actores. Ahí están los trabajadores del poder judicial peleando para defender su empleo, la libertad. Los estudiantes se han sumado a la discusión, tanto la UNAM como alumnos de Derecho de Universidades privadas han tomado las calles para manifestar su descontento.

Como respuesta los jóvenes sólo han encontrado descalificaciones de parte del presidente de la república, quienes ha dicho que son manipulados por sus maestros, que el espíritu de los neoliberales los ha poseído. El mismo cuento desde hace 6 años. El detalle es que muchos de estos jóvenes apoyaban a Morena, muchos de ellos pertenecen al alma mater de Claudia Sheinbaum y ella sabe la fuerza que puede tomar un movimiento universitario. Ella fue líder estudiantil en 1986.

Los legisladores de Morena y sus aliados con soberbia descalifican las críticas. Algunos no saben lo que votaron como Sergio Mayer, el ex Garibaldi, orgulloso de haber votado la reforma al “poder legislativo”, así lo dijo mientras se echaba unos tacos al pastor con el otro legislador de Morena, Cuauhtémoc Blanco.

Los legisladores de Morena están urgidos en entregarle este último regalo al presidente, Andrés Manuel López Obrador, una reforma que no tiene ni pies ni cabeza y que nos va afectar a todos y aunque lo niegue una de las primeras damnificadas por esta última ocurrencia es la presidenta electa.

Claudia Sheinbaum va recibir un país con finanzas contraídas, prácticamente va arrancar su gobierno con las cajas vacías, pero además esta reforma va ahuyentar a los capitales. Los beneficios del nearshoring cada vez se ven más lejanos, varias empresas internacionales ya anunciaron que pondrán en pausa sus inversiones en México.

Si mañana usted pierde su empleo por el cierre de una empresa internacional no se diga sorprendido. Tampoco debe sorprenderse cuando el SAT le cobre impuestos de más y usted no pueda ampararse porque esa figura desaparece con la reforma judicial, así Hacienda siempre va a tener la razón.

También el IMMS va a tener la razón cuando no le entreguen los medicamentos y usted no se pueda amparar porque finalmente lo que hace a esta ley es lo que advirtió Molotov hace mucho: “si le das más poder al poder más pronto te van a venir a c…”.

¿Qué título le pondría usted al final del sexenio de AMLO? Se lo pregunto porque estamos teniendo un final caótico. Las elecciones no terminaron con la polarización, por el contrario, el debate de la reforma judicial ha incrementado las posturas encontradas.

A la discusión se han sumado nuevos actores. Ahí están los trabajadores del poder judicial peleando para defender su empleo, la libertad. Los estudiantes se han sumado a la discusión, tanto la UNAM como alumnos de Derecho de Universidades privadas han tomado las calles para manifestar su descontento.

Como respuesta los jóvenes sólo han encontrado descalificaciones de parte del presidente de la república, quienes ha dicho que son manipulados por sus maestros, que el espíritu de los neoliberales los ha poseído. El mismo cuento desde hace 6 años. El detalle es que muchos de estos jóvenes apoyaban a Morena, muchos de ellos pertenecen al alma mater de Claudia Sheinbaum y ella sabe la fuerza que puede tomar un movimiento universitario. Ella fue líder estudiantil en 1986.

Los legisladores de Morena y sus aliados con soberbia descalifican las críticas. Algunos no saben lo que votaron como Sergio Mayer, el ex Garibaldi, orgulloso de haber votado la reforma al “poder legislativo”, así lo dijo mientras se echaba unos tacos al pastor con el otro legislador de Morena, Cuauhtémoc Blanco.

Los legisladores de Morena están urgidos en entregarle este último regalo al presidente, Andrés Manuel López Obrador, una reforma que no tiene ni pies ni cabeza y que nos va afectar a todos y aunque lo niegue una de las primeras damnificadas por esta última ocurrencia es la presidenta electa.

Claudia Sheinbaum va recibir un país con finanzas contraídas, prácticamente va arrancar su gobierno con las cajas vacías, pero además esta reforma va ahuyentar a los capitales. Los beneficios del nearshoring cada vez se ven más lejanos, varias empresas internacionales ya anunciaron que pondrán en pausa sus inversiones en México.

Si mañana usted pierde su empleo por el cierre de una empresa internacional no se diga sorprendido. Tampoco debe sorprenderse cuando el SAT le cobre impuestos de más y usted no pueda ampararse porque esa figura desaparece con la reforma judicial, así Hacienda siempre va a tener la razón.

También el IMMS va a tener la razón cuando no le entreguen los medicamentos y usted no se pueda amparar porque finalmente lo que hace a esta ley es lo que advirtió Molotov hace mucho: “si le das más poder al poder más pronto te van a venir a c…”.