Torreón, Coahuila.- Con poco más de 17 años en la benemérita institución, a la que llegó a realizar su servicio social un 24 de febrero del 2005, Rigoberto Hernández de los Santos, recuerda que como socorrista ha vivido la inseguridad y la pandemia, que dejaron muchas víctimas.
Estudiante del CBTA de La Partida y profesionista de la carrera de Ingeniería Metal Mecánico de la UTT, Rigoberto Hernández de los Santos aún tiene memoria de como llegó a Cruz Roja y como se ha convertido en su segundo hogar, con una misión muy importante, que es la de salvar vidas y ayudar a los demás.
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El originario de Buen Abrigo, en el municipio de Matamoros, y hoy padre de familia de un pequeño, recuerda: “Por medio de la preparatoria donde estudiaba teníamos que hacer nuestro servicio social, y a mí me tocó hacerlo en la Cruz Roja en Torreón, de nuestra generación entramos unos 130 muchachos, entre hombres y mujeres, entre los que venían los fines de semana y los de entre semana, pero de todos ellos, ya solo quedamos unos cuántos”, recuerda Hernández de los Santos.
“Para ser técnico de urgencias médicas iniciamos con todo un proceso de capacitación, terminamos ese, y luego vinieron los cursos de rescate urbano, de incendios, de derrumbes, viajamos a Toluca, llegue a los 17 años y 17 años después aquí sigo”, cuenta.
Rigoberto destaca que “Se siente bonito cuanto te agradecen, cuando la gente reconoce tu trabajo, tu esfuerzo y tu dedicación”.
INSEGURIDAD Y PANDEMIA, LOS DIFÍCILES RECUERDOS DEL SOCORRISTA EN TORREÓN
“Me toco vivir la etapa más violenta en Torreón, de 2008 a 2013, mis papás me decían que ya no viniera que me quedara en la casa, pero, tomando las medidas necesarias y los cuidados de acceso seguro, se salió adelante, nunca nos hicieron nada a nosotros, pues sabían cuál era nuestra misión”, reitero Rigoberto
Me ha tocado vivir muchas experiencias desagradables y ahora con el tema de la pandemia del Covid también fueron dos años de muchas tragedias que atender, aunque ahora equipados por completo, aseguró.
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TRAGEDIA EN PUENTE, EL PEOR MOMENTO DEL SOCORRISTA EN TORREÓN
Uno de los accidentes que más le ha quedado grabado en su mente es el que ocurrió en el puente de Revolución y Cuauhtémoc, donde una persona del sexo femenino y un menor de edad (seis años) perdieron la vida tras impactarse con su vehículo a unos días de que lo inauguraran, compartió el rescatista.
A pesar de ello, Rigoberto, el socorrista en Torreón, ama su trabajo y todos los días da su mejor esfuerzo pese a los recuerdos de la inseguridad y el Covid.