Torreón, Coahuila.- El penúltimo compromiso de la fase regularen casa no fue un lleno; sin embargo, el ambiente se vivióespectacular. La oportunidad para los seguidores del Santos Laguna,actual campeón de la Liga MX, fue inmejorable para recibir a losRayados de Monterrey: el archienemigo de la región.
El partido fue emotivo en el marco de los 12 años de AlejandroIrraragorri como mandamás santista; un proyecto que junto conDaniel Guzmán como director técnico, estaba originalmentedestinado para la ciudad de Querétaro. Hoy, se puede contabilizaren 4 títulos de Liga (Clausura 2008, Clausura 2012, Clausura 2015y Clausura 2018), una Copa MX, un Campeón de Campeones y elComplejo Deportivo y Cultural TSM.
Lo negro se vivió previo al silbatazo inicial del árbitroCésar Arturo Ramos. 3 integrantes de la barra regiomontana fuerondetenidos por pelearse entre sí, y puestos a disposición delMinisterio Público. Minutos más tarde, otro más fue llevado,también por conducta inapropiada.
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Lo colorido de la noche en la otrora ‘Casa del Dolor Ajeno’se registró al segundo tiempo, rumbo a la recta final delencuentro. La gente lagunera, que desde días antes se puso deacuerdo en redes sociales, utilizó papel celofán verde sobre laslámparas de sus celulares para iluminar el inmueble, al unísonodel canto de “Dale, campeón”.
Al final de las acciones de la fecha 14 en la Comarca, entre elbuen ánimo por la victoria, el brasileño Matheus Dória lamentó,con voz alta desde el vestidor, que su gol tuvo que ser anuladogracias a la intervención del videoarbitraje (VAR).
