Comarca Lagunera.- De manera discreta y sin los reflectores que suelen tener los deportistas exitosos, Elliot Chávez, flamante campeón de box, se ha convertido en un extraordinario ejemplo como atleta y ser humano, al combinar su exigente faceta como peleador, con otras que tienen que ver con labor de ayuda, al dedicar sus tiempos libres a ser voluntario como paramédico en la Cruz Roja de Lerdo, además de entrenar a niños con alguna discapacidad, aprovechando sus conocimientos como Licenciado en Educación Física.
Nació en Lerdo, radica en Gómez Palacio y ha representado a Torreón como boxeador, por lo que se considera un lagunero al cien por ciento y siempre dispuesto a ayudar a quienes más lo necesitan: “siempre he sabido ayudar de manera implícita y siento desde un principio que mi vocación es enseñar y aportarles algo a las personas, me gusta hacerlo, es algo que me da satisfacción”.
Recientemente, Elliot fue invitado para dar una charla motivacional, dirigida a niños que participan en un curso de verano en Lerdo, a la cual acudió con todo el entusiasmo y con el deseo de dar buen ejemplo y los mejores consejos a todos ellos: “el mejor consejo que siempre les puedo dar a los niños es que mezclen estudio y deporte, lo primero que les digo es que todo empieza con un sueño y que a partir de ahí deben esforzarse y esmerarse, no darse por vencidos, ser perseverantes”.
En el terreno del boxeo, el joven pugilista tiene en su poder tres cinturones de campeón: “mis últimas tres peleas han sido por campeonato, la primera fue por el Campeonato Nacional Juvenil, lo gané en Puerto Vallarta, la segunda fue en marzo de este año, en Culiacán, Sinaloa, donde gané el Campeonato de Norte América en peso Súper Pluma y la tercera fue el pasado 11 de junio en Torreón, en donde gané el Campeonato Nacional”.
Actualmente, se prepara para defender todos sus títulos y alcanzar su sueño de ser campeón del mundo, indicando que hay propuestas de pelea y las está analizando, junto con sus entrenadores ‘Mapimí’ y Gustavo Rodríguez. “Aspiro a llegar a ser campeón mundial absoluto en el peso Súper Pluma, primeramente Dios voy a lograrlo”.
En Gómez Palacio, Elliot es entrenador de basquetbol de niños con discapacidad, a los cuales tiene mucho cariño: “es una labor muy bonita, son personas que aprenden y te sorprenden, es algo que disfruto mucho y que la gente te reconoce”.
El campeón lagunero, además es preparador de boxeo olímpico en La Jabonera, dándose tiempo además para hacer otra labor de ayuda, como es la de paramédico en la Cruz Roja de Lerdo: “muchos de mis ratos libres los dedico a ser paramédico, voy y hago guardia en Cruz Roja para ayudar en lo que sea necesario, es algo que también me nace y me gusta hacer”.
En definitiva, Elliot Chávez ha sabido ser una persona de bien y un ganador en todo terreno, siempre con el anhelo de transmitir cosas positivas: “siempre he dicho que el deporte es la mejor medicina que se nos puede dar y creer en sí mismos, les comparto una frase que mi hermana (también boxeadora) siempre la ha dicho, ‘creer es crear’”.
