Torreón, Coahuila. - La Campeona del Consejo Mundial del Boxeo, Yulihan ‘Cobrita’ Luna, se siente emocionada por haber logrado vencer a Mayeli Flores en la defensa de su título el pasado 2 de abril del 2022, en Puebla, logrando así “desempolvar” su cinturón luego de más de un año buscando rival.
La boxeadora gomezpalatina platicó con El Sol de La Laguna sobre las sensaciones que le dejó este enfrentamiento ante una difícil rival, destacando que son estilos completamente diferentes: “Iba a ser una pelea complicada. Ella es noqueadora, pero afortunadamente la dedicación, el trabajo en el gimnasio y la preparación nos ayudó a sacar bien la pelea. A pesar de eso seguimos y logramos retener el título. Es un sentimiento muy grande desde que peleé con Mariana y le gané. Desgraciadamente no se podía, pero fuimos pacientes y le echamos muchas ganas para lograr los objetivos”.
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A lo anterior, la campeona, que logró sumar 23 triunfos en el profesionalismo, habló sobre lo frustrante que había sido no encontrar a quién enfrentar para defender su título, pues recalcó qué pasó de tener todos los reflectores tras ganarle a la ‘Barby’ a no conseguir contrincante. Sin embargo, no dejó de trabajar y ser paciente hasta conseguir la oportunidad que tanto deseaba.
“Era muy frustrante estar tanto tiempo sin defender el título que tanto costó ganar, ya desempolvé mi cinturón. Mucha gente no sabe lo que pasamos en cada preparación para llegar a una pelea. Son muchas cosas las que tenemos que pasar. Esta ha sido de las peleas más complicadas por el rival. Mayeli me dejó una herida grave, me sorprendí porque nunca subió un doctor a revisar mi herida hasta que ya me tuvieran que suturar. Cuando van a dar la decisión lloro porque es un sentimiento el esfuerzo que hace uno, es un sacrificio”.
Por otra parte, la ‘Cobrita’ mencionó que ya está pensando en sus siguientes objetivos destacando que ha platicado con su promotor sobre la posibilidad de unificar en Europa o pedirle la revancha con Mariana Juárez. Todo esto con la motivación de su familia y, lo más importante, su hija: “Yo estoy dispuesta a regresar a entrenar lo más pronto posible. Sí quiero llegar a más cosas se necesita disciplina. Mi mamá me subió a mi niña en esta pelea y le dio felicidad. Ya nada más se me quedó viendo la sangre en la cara, pero andaba muy contenta. Duré dos semanas en Ciudad de México sin verla y la veía emocionada. Fue un gusto para el que mi hija le vea triunfar. Mis peleas siempre son dedicadas a mi hija y familia”.