Torreón, Coahuila. – Los Guerreros del Santos Laguna siguen trabajando con miras a su cuarto duelo del certamen, en donde el próximo jueves se verán las caras frente a las Águilas del América, asegurando que el duelo frente al equipo de Coapa no es diferente al jugar contra otro equipos, sin embargo, reconoce que debido a los reflectores mediáticos que ostenta, eso vuelve al partido con más emociones, sin embargo, para él, no es especial ni mucho menos el más importante del torneo.
A cerca del esquema táctico con el que se espera salir a cancha del Olímpico Universitario, el charrúa aseguró que se ha venido enfrentando el torneo supliendo necesidades que se tienen para el parado, sin embargo, hasta el momento Andrade y Govea no se han recuperado y acumularán una baja más, ya que acepta que la carga ha sido fuerte luego de un parón por la pandemia.
Asimismo, sobre el tema del arbitraje, admite que son situaciones que están fuera de sus manos, sin embargo, no quita el dedo del renglón de que lamentablemente han sufrido de malas actuaciones por parte del colegiado, situación que espera vaya mejorando y sobre todo, pase desapercibido ya que lo que debe importar es el desempeño en la cancha y no las decisiones arbitrales.
De la misma forma abordó que ante las Águilas podrá repetir en la zaga, situación que hasta el momento le ha sido difícil por las lesiones y sanciones, por lo que espera jornada con jornada mostrar su mejor juego, esperando que ante los capitalino puedan desplegar un futbol vistoso y sobre todo cuidados en la última línea, ya que reconoce el poderío ofensivo que ostentan el América, con nombre como Federico Viñas y Sebastián Córdova, por lo que confía que su estilo agresivo y directo sea el que se imponga la noche del jueves.
Por último, mencionó que el equipo sigue en búsqueda de una nueva fisionomía en el campo, sin despegarse de la esencia que caracteriza a los Guerreros, la cual es sobrellevar el dibujo táctico del encuentro y poseer la pelota para ser agresivo y directo, pero esperará para definir a sus once hombre en el último entrenamiento previo al viaje a la Ciudad de México.