Torreón, Coahuila.- Mucho ruido y muy pocas nueces, juego gris, con tierra al inicio pero sin emociones fuertes. Santos se ve desangelado y sin emoción. Rayados se va con un marcador cómodo.
Con tierra y todo, clima clásico nada desconocido para la afición lagunera, la buena entrada posiblemente la robusteció la afición regia que reside en Torreón. Se habla que se vendieron diez mil boletos, pero la entrada fue muy pobre para un duelo en estas instancias.
¡Juraron y perjuraron! que este juego no era para nada una revancha, pero en la cancha los duelos entre las parejitas que se formaron conforme avanzó el juego, fueron muy claras. La marca de Hugo Rodríguez sobre Vincent Janssen, fue clara. Se lo intercambiaba con Félix Torres y así sucesivamente se lo fueron turnando.
Un dato curioso para este juego, se esperaba que Rodolfo Pizarro viera acción en el partido, pero el “turco” Mohamed ni a la banca lo sacó.
Quien de plano no la trae consigo es Diego Valdés, no pudo meter el penal desde los once pasos. ¡Una barridita!
“Bajita la mano”, el “turco” Mohamed comenzó a utilizar más jugadores titulares que del cuadro alterno, al 34’ metió a Jesús Gallardo y con esto le pone todavía más seriedad al juego.
La indicación por lo que vimos en el juego, fue por parte de Almada que siempre hace el dos a uno, del juego hasta el minuto 43’ de la primera mitad se jugó en la cancha de Rayados.
En las bancas, dos técnicos totalmente distintos, uno muy explosivo y el otro demasiado pasivo como Mohamed. Almada, no se sienta un solo segundo, es el señor del rostro eterno de la angustia.
En el segundo tiempo, donde Santos termina atacando en cabecera norte, se auguraba que se marcara un penal más a la lista de cinco entre Copa y Liga.
Pues Almada al minuto 16’ prácticamente utilizó casi a todo el plantel titular de la LigaMx, a ver si le sale.
Pese a que en el inicio del segundo tiempo hubo varias emociones, después del minuto 10’ el juego cayó en un bache muy letargado, ¡ni fu y ni fa!
Por cierto, al minuto 78’ por primera vez en todo el juego Almada se sienta por unos instantes, pero qué creen; no pasó un sólo minuto y otra vez de pie.
Pues nomás no conectó el juego. Por momentos sí, por otros nada más no. Arteaga en dos ocasiones decretaron que pues no iba a haber goles en este juego. Mientras tanto en la tribuna a sugerencia de otros juegos, el estadio lució en una entrada muy floja. Pues cero cero. No se hicieron un solo rasguño.
