Torreón, Coahuila.- Luego de la dolorosa goleada en casa por 4-1 ante Pachuca, el equipo de Santos Laguna regresará este martes a los trabajos en el TSM, arrancando la preparación para otra complicada prueba, al tener que visitar ni menos que al superlíder Rayados de Monterrey en la fecha 15, en partido a disputarse el próximo domingo en el ‘Gigante de Acero’.
El actual Clausura se encuentra en la recta final y el conjunto que dirige Eduardo Fentanes sigue sin hallar la fórmula para mantener en cero la portería propia, siendo después de 14 fechas disputadas, la segunda defensa más castigada con 31 goles recibidos, solo por arriba de Mazatlán que tiene 33 tantos en contra, por lo que el estratega y sus pupilos tendrán que poner énfasis en ese tema o de lo contrario es muy probable que queden fuera de la zona de repechaje.
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Será una semana difícil para el equipo de la comarca, el plantel está desmotivado y no se ve por dónde le puedan hacer partido al mejor equipo de la campaña, que es el de Rayados que dirige Víctor Manuel Vucetich, sobre todo porque los regios jugarán en casa con el incondicional apoyo de su afición y van a querer recuperarse de la derrota sufrida en el Azteca ante el América el pasado sábado.
ACEVEDO: “HAY VERGÜENZA DEPORTIVA”
Al final el encuentro ante el Pachuca, el portero Carlos Acevedo fue de los pocos que hablaron del mal momento que atraviesa Santos en general en el torneo:
“No hay palabras, hay que afrontar lo que estamos viviendo, cerrar la boca, estamos con una vergüenza deportiva difícil, un trago muy amargo por supuesto y nomás nos quedan esos tres juegos para seguir luchando y seguir peleando por puestos de repechaje y como dicen, con una vergüenza deportiva y con mucho dolor”.
“No podemos hablar, hoy nos toca ‘tragar veneno’ y somos todos responsables y la única forma de componer esto es con buenos resultados y jugar bien, es lo que intentamos semana tras semana, pero no nos ha salido nada, los mismos errores infantiles los volvemos a cometer, hay que ser autocríticos y si hoy nos tocan las mentadas de madre hay que saber recibirlas”.