Vuelve el jugador número 12 al Estadio Corona

Con una asistencia de 6 mil 510 aficionados, Santos vence al Necaxa tres goles por uno

Mariana González | Noticias de El Sol de La Laguna

  · domingo 7 de marzo de 2021

Torreón, Coahuila. – Tras un año de espera, la afición regresó a las gradas del Estadio Corona. El partido entre Santos Laguna y los Rayos del Necaxa, de la jornada 10 del Clausura 2021, fue el designado para evaluar la reapertura al público bajo estrictas medidas de salud debido a los estragos que ha ocasionado la pandemia del Covid-19.

La vigilancia se hizo presente desde el ingreso a las instalaciones del Territorio Santos Modelo (TSM), que sólo permitió el 40% de su capacidad, lo equivalente a 12 mil personas. Apenas y se alcanzaron a observar algunos puestos ambulantes en el estacionamiento. Uno tras otro, los hinchas comenzaron a llegar con la emoción disfrazada entre los cubrebocas y caretas exigidas por la misma institución.

Para algunos, la foto del recuerdo a las afueras del estadio no pudo faltar, tanto de manera individual como en parejas. Mientras que otros, de forma más discreta, simplemente se dirigieron hacia los diferentes accesos del estadio donde se encontraban los filtros sanitarios que, como punto más importante, resaltaba la “sana distancia” para mantener el orden.

“Soy aficionada del Santos Laguna desde que jugaba en el antiguo Corona. Es una emoción muy grande porque ya hacía falta. Se extrañaban estos partidos y más que nada estar en el estadio”, resaltó una aficionada del conjunto de La Laguna, quien además no dudo en señalar que “tal vez no sea el momento adecuado para regresar pero igual previniéndose uno mismo y protegiéndose, está bien”.

Por su parte, otro seguidor no dejó pasar la oportunidad y desde Pachuca decidió viajar hasta Torreón para ser parte de este momento: “Mi abuelito era aficionado a Santos. Es mi primera vez en el TSM. Soy apasionado al futbol y quería conocer el Corona. Es responsabilidad de cada persona que asiste saber el riesgo que se corre. Es emocionante pero también depende de la responsabilidad de cada quien”.

A las 6:30 de la tarde, ambos equipos ingresaron a la cancha para el calentamiento. Primero salió el cuadro visitante entre abucheos y silbidos por parte del escaso público que apenas comenzaba a llenar las butacas; mientras que, de forma inmediata, los Guerreros fueron recibidos entre aplausos, esos que no se escuchaban desde hace tiempo.

El momento más esperado llegó. El himno de la Liga MX comenzó a sonar para dar paso a ambos conjuntos. Pasados los 15 minutos de juego, y a pesar de que el marcador seguía cero por cero, se sentía un gran ambiente. Con porras como “Santos, Santos” o “Dale Guerrero”, el público buscó la manera de demostrar que estaba presente y no solo para alabar los albiverdes, sino también para apagar los ánimos del rival y hasta del juez central Erick Yair Galindo, a quien no le faltaron reclamos y unas cuantas palabras altisonantes.

“Hagamos de este un territorio seguro”, se escuchaba en reiteradas ocasiones desde los micrófonos del recinto para exigir el respeto de los protocolos de salud y no pasar por alto la eliminación del grito discriminatorio tras el despeje del arquero. Incluso, personal de seguridad vigiló constantemente que cada asistente permaneciera en su lugar y tuvieran solo el contacto necesario con los vendedores de comida, al mismo tiempo que se encargaron de desinfectar los pasamanos.

Tuvieron que pasar 37 minutos para que se gritara el gol. Sin duda un momento especial para el joven delantero Santiago Muñoz quien, con una jugada individual, le regaló a Santos Laguna y a su afición el primer tanto de la noche, suficiente para irse al descanso con la victoria parcial de un gol por cero al completarse los 45 minutos.

Para la segunda mitad del encuentro, los ánimos comenzaron a calentarse y no solo en la cancha, sino también en las gradas. El estratega Guillermo Almada parecía no ser el único que le daba instrucciones a sus jugadores desde el área técnica, pues dentro de los más de 6 mil 510 espectadores no falto aquel que lanzara órdenes o juzgara el accionar de los Guerreros. La presión funcionó. Juan Otero puso a la afición de pie al marcar el dos por cero en la pizarra, con un disparo de media distancia que terminó venciendo al portero Luis Malagón (53’).

Sin embargo, cuando todo parecía ir a la perfección se anunció la expulsión de un grupo de personas por desobedecer las instrucciones sanitarias. Y no solo eso, pues justo cuando el Necaxa, dirigido por José Cruz, estaba nulificado en la cancha y sin encontrar cómo hacerse presentes en el arco, apareció Daniel López para dar un rayo de esperanza y acortar la desventaja a dos goles por uno.

En la recta final, Fernando Gorriarán aseguró la victoria y los tres puntos para los Guerreros al ingresar al área chica y anotar el tercero de la noche. Tras el silbatazo final, la euforia comenzó a invadir a los hinchas que entre aplausos despidieron a los jugadores albiverdes, mientras se les pedía permanecer sentados y atentos al protocolo de desalojo para evitar aglomeraciones en las salidas.

Fue contra Necaxa, en la jornada 10 del Clausura 2020, cuando Santos Laguna jugó el primer partido sin afición debido al brote del Covid-19 y el último antes de suspenderse el torneo. Ahora, los Guerreros vuelven a reabrir las puertas del Estadio Corona en espera de saber si el jugador número 12 podrá seguir asistiendo para hacer pesar más su cancha, su fortaleza.