Marco Esparza ‘El payaso de rodeo’, un padre de grandes distancias

El corredor lagunero ha sido una gran influencia en la vida atlética de sus hijos

Lauro Villegas | Noticias de El Sol de La Laguna

  · sábado 20 de junio de 2020

Marco Antonio Esparza ha inyectado y heredado en sus hijos el amor por el deporte y una vida sana | Cortesía

Torreón, Coahuila. – Sin duda alguna una de las tareas más difíciles de la vida y para la cual nadie está listo sino aprende en el camino, es ser padre, ser esa persona que, con su ejemplo de camino e instrucción a sus hijos, para formarlos como gente de bien para la sociedad y Marco Antonio Esparza Rivera es un ejemplo de amor al deporte, pero sobre todo a su familia.

Con 38 años de edad y padre de tres hijos, el conocido ‘Payaso de rodeo’ cuenta que desde los nueve años se inició por error en la carreras, ya que de niño vivía en La Fuente y su hermana Norma, quien la señala como culpable, salía a caminar y ejercitarse, “mi mamá me mandaba a cuidarla y acompañarla, y yo miraba a un señor, le apode el chilango, él me influyó en correr, le pregunte si esto era difícil y me dijo que era fácil y él me enseñó técnica de trote y de respiración y ya desde ahí yo levantaba a mi hermana para ir a hacer ejercicio y mi hermana me inscribió a mi primer carrera”, comentó.

La familia Esparza Pizaña se ha ganado cariño y apreció al participar en las carreras

Igualmente Esparza Rivera cuenta que vestirse de payaso de rodeo fue por ver a Mario “la parka” y siempre le llamó la atención correr así y mucho tiempo corrió como el santo lagunero, hizo una pausa en el 2012 y en el 2017 regresó pero no podía correr del todo bien con la máscara debido a que necesitaba usar lentes y así pensó en que le gustaba para disfraz y fue como nació el payaso de rodeo en la carrera de Cuencamé en 2018.

El corredor lagunero cuenta que él nunca exigió a sus hijos hacer deporte y todo fue en base al ejemplo que ellos al verlo correr fueron adentrándose al mundo de la actividad física y de las carreras.

Melissa Esparza Pizaña cuenta con una racha de victorias increíble y apuntala a ser una gran deportista lagunera

Sus tres hijos, quienes lo acompañan en sus pruebas, Marco Antonio de 18 años, Montserrat Esparza Pizaña de 17 y Melissa de 11 años, desde niños crecieron viendo a sus padre competir y llevar una vida sana, por lo que cada uno de ellos ha decidido convertir esa influencia de su infancia en un camino que seguir en su juventud, ya que cada uno está inmerso en alguna pasión deportiva, el mayor corre como su padre, Montserrat si bien es amante de las carreras, tiene una pasión por el gimnasio y la menor, Melissa, va para un año en calidad de invicta, al no perder ninguna carrera infantil en las que ha participado, al grado de obtener patrocinios por su buen desempeño.

De esta forma Marco Antonio Esparza Rivera muestra que el reto de ser padre si bien en primera instancia luce difícil, poco a poco lo ha sabido llevar a cabo en base al respeto, el amor, la tolerancia y sobre todo ha convertido al deporte en un aliado que ha influenciado a sus hijos para llevar una vida en mente y cuerpo, completamente sana.