En los pasillos del Mercado José Ramón Valdes, se puede escuchar el grito de la señora Guille, propietaria del “Comedor Guille” ofreciendo cada uno de sus platillos, los caldos de res, pollo y menudo son la carta fuerte de este pequeño establecimiento con más de siete décadas de historia y en funcionamiento.
Contrario a lo que se pudiera pensar especio a las altas temperaturas se se siguen registrando en la Comarca Lagunera, los caldos tradicionales de este peculiar mercado son los más solicitados a la hora de degustar los sagrados alimentos.
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Guillermina García Sifuentes compartió que diariamente atienden entre 25 y 30 personas “que vienen a echarse su caldo de res, de pollo o menudo, los invitamos a que vengan a conocer nuestro establecimiento”.
Reconoció que aunque ha sido mucho e valor que se ha sentido, hay gente que se queda a comer en el establecimiento hay quienes prefieren pedir comida para llevar, los recios oscilan en los 65 pesos y 80 el plato grande.
Durante un recorrido por el Mercado José Ramón Valdes edificado en la década de los 50’s se puede percibir la atmósfera caldos y de gente ‘echada pa’ delante’ que todos los días se levanta temprano para abrir sus establecimientos y tratar lograr buenas ventas.
