Nació como enano, murió como gigante: La historia de Adam Rainer

Durante su vida perdió la visión en un ojo y la audición en un oído

El Sol de La Laguna

  · miércoles 15 de diciembre de 2021

La historia de Adam Rainer sigue siendo un misterio para la medicina. A los 19 años fue declarado como enano ya que sólo medía un metro y 18 centímetros; al cumplir 30 años medía dos metros y 16 centímetros, creciendo un metro en poco más de 10 años, por lo que pasó a ser considerado un gigante.

Adam Rainer nació de padres de estatura media en 1899 en la ciudad de Graz, Austria. A los 15 años intentó alistarse en el ejército donde fue rechazado debido a su pequeña estatura. Cuatro años después de este rechazo, a los 19 años, los médicos lo declararon como enano.

Para ese tiempo la estatura de Rainer era mucho más pequeña al promedio, pero tanto sus manos como pies eran anormalmente grandes, lo que generaba muchas sospechas. En su primer intento para alistarse al ejército usaba zapatos de talla 43, a los 18 años ya calzaba del número 53 cuatro tallas menos que el basquetbolista Shaquille O’Neal, todo esto mientras seguía siendo considerado un enano.

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A los 21 años comenzó a crecer de manera descontrolada, lo que ocasionó una curvatura en su espina dorsal, que terminó postrándolo en una cama con terribles dolores en la espalda. Rainer pasó parte de su vida sin poder valerse por sí mismo y viviendo en una residencia de mayores, hasta que falleció a los 51 años de edad.

¿Por qué Adam Rainer pasó de ser enano a gigante?

Debido a la época, la documentación y medios sobre su caso son escasos, por lo que solo se han generado hipótesis sobre él.

El gigantismo se desarrolla durante la niñez, ya que se presenta un tumor en la hipófisis, glándula generadora de la hormona del crecimiento, lo que ocasiona el aumento desmedido en la estatura. Pero el caso de Rainer fue extremadamente curioso, debido a que este crecimiento desmedido se dio hasta los 20 años, cuando su etapa de crecimiento ya había terminado.

En los años 1930 y 1931, médicos de la época, concluyeron que sufría acromegalia, una enfermedad provocada por un tumor en la glándula pituitaria ocasionando que la hormona de crecimiento se segregara en grandes cantidades, lo que produjo que sus manos y pies crecieran de sobremanera.

Debido a esta enfermedad se le tuvo que operar, lo que consiguió que su ritmo de crecimiento se viera reducido, pero la intervención llegó tarde, ya que para ese momento su estatura había aumentado durante una década. Actualmente este tipo de tumores son considerados benignos, y en la gran mayoría de los casos son extirpados o medicados, en caso de que no se pueda extraer por completo.

Con el pasar del tiempo, Rainer, perdió la visión en un ojo y la audición en un oído, además de que la deformación de su columna llegó a un nivel irreversible, lo que terminó confinándolo a mantenerse en cama.

A día de hoy, Adam Rainer, sigue siendo un misterio para la medicina, ya que es el único ser humano que ha pasado de ser oficialmente enano a un gigante de más de dos metros de altura.