Un hecho tan alarmante como sorprendente está dando que hablar en las redes estos días: tu smartphone te podría estar provocando un daño físico irreversible. Todo se debe a la posición de la mano dominante a la hora de sostener el teléfono, que según se ha viralizado en internet, podría provocar que el dedo meñique sufra una deformación como esta.
Algunas personas, al comprobar sus manos después de semejante observación, han notado que sí tienen algo deformado en el dedo. No han tardado en achacarlo al uso (o más bien abuso) del móvil, por ello en Twitter el tema ha dado que hablar.
El traumatólogo y cirujano ortopédico Xavier Cuscó Segarra, doctor del Hospital Quirónsalud Barcelona en la unidad Instituto Traumatología Quirón - Dr. Cugat, para que nos arrojara luz sobre este rumor que está causando furor en internet. Este especialista en cirugía de la mano nos ha confirmado que no se puede hablar de relación directa entre una particular forma del dedo meñique y el uso del móvil, puesto que no hay estudios con base científica sobre el tema. Además, dice el experto, "la deformidad de diferentes dedos es frecuente en la población general. En este caso concreto la presencia de deformidad en una gran parte de la población sugiere que estadísticamente es poco probable que haya una relación causal entre el uso del móvil y la deformidad del quinto dedo."
Celular causante de tendinitis
Los celulares llegaron para ofrecer infinitas posibilidades para facilitar la vida de las personas, desde cumplir con el objetivo original de facilitar cada vez más la comunicación y las tareas diarias -laborales o no- hasta otorgar distintas opciones para el tiempo de ocio, pero el uso en exceso de smartphones también tiene sus propias complicaciones: puede detonar una patología, como tendinitis.
También pueden causar dolores en la espalda, en el cuello y rigidez muscular como producto de la poca movilidad corporal o de mantener posturas inadecuadas por un periodo extenso. Las problemáticas más usuales son la tendinitis en la mano e incluso en la muñeca y, sobre todo, el dedo pulgar, ya que es el más activo durante el uso de celulares.