Torreón, Coahuila.- El Centro de Danza Nijinsky destaca por ser uno de los mejores en su tipo en la comarca lagunera, teniendo más de 30 años como formador de bailarinas y bailarines de ballet, contando con la atinada de dirección de las hermanas Carolina, Mercedes y Guadalupe Morales.
Para hablar de los logros y de lo que representa esta expresión artística en los menores que la practican, El Sol de La Laguna tuvo una charla con Carolina Morales, en el marco del Día Mundial del Ballet que este año se conmemora el primero de noviembre:
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“Hace 34 años iniciamos mis hermanas y yo con la Academia, yo empecé en Casa de la Cultura y después de ahí decidimos tener el Centro de Danza Nijinsky. Hemos tenido alumnas que se han ido a la Escuela Superior de Música y Danza (de la Ciudad de México), por ejemplo, mi sobrina fue a estudiar ahí, pero para maestra en enseñanza de la danza clásica, también he tenido alumnos que se van a estudiar la carrera, ya sea de ballet de danza contemporánea y les ha ido bien, en parte, les ha ayudado mucho los estudios básicos que iniciaron aquí”.
En este centro de danza se reciben niñas desde los 3 años de edad para que practiquen lo que se llama ‘baby ballet’, que es una preparación física, para psicomotricidad, para que vayan conociendo su lado derecho, el izquierdo, hacer conciencia de su cuerpo.
¿Por qué se recomienda la práctica del ballet?
“El ballet está basado en mucha disciplina, no hablo de disciplina nada más de ‘párate derecho’, ‘haz esto’, no, me refiero a otros aspectos, por ejemplo, su peinado debe ser siempre recogido, para que al momento de hacer ejercicios, sudar, no estén con el pelo al frente o con la cola de caballo pegándole en la cara, metiéndose a los ojos, entonces, desde su vestimenta y su peinado, es una disciplina”.
Aunque se puede iniciar la práctica del ballet desde 3 años, Carolina Morales dijo que lo recomendable para quien lo quiere tomar como una carrera, es a los 9 años:
“Cuando lo practican profesionalmente, a partir de los 9 años es lo ideal, profesionalmente me refiero, por ejemplo, a incursionar en la Escuela Superior de Música y Danza en México o la Escuela de Danza Clásica. Nosotros somos academias que lo practicamos, digamos, como un complemento nada más, sin embargo, lo importante es que las escuelas no sean solamente un entretenimiento, sino que tengan de veras las bases de una formación”.
Para practicar el ballet en alguna academia o centro, no es necesario cumplir con un perfil, sin embargo, para entrar a una institución más especializada, sí hay algunas restricciones:
“Por ejemplo, en Monterrey se les hace un examen físico, un examen psicométrico y el examen de habilidades físicas, ahí sí hay restricciones. Aquí en una academia vienen como un hobby, pero sí se trata de darles las bases correctas. Otro ejemplo es la Escuela Superior de Música y Danza, ahí te dicen ‘está pasada de peso’ y no puedes ingresar, el peso es un impedimento tremendo, o si tiene su piecito plano, necesitan tener un buen arco para desarrollar, son ese tipo de limitantes las que hay, sobre todo de tipo físico”.
FALTA MÁS APOYO
Para Carolina Morales, en lo que respecta a La Laguna, hace falta mucho más apoyo para el ballet, no solo para practicarlo, sino para traer a academias o instructores reconocidos a nivel nacional o internacional:
“Lo que yo siento es que aquí falta apoyo del municipio y del estado, más apoyo, para qué, más difusión de lo que es la danza, por ejemplo, viene un ballet al Teatro Nazas y el boleto está muy elevado, o sea, no puede ir cualquier persona. Sería maravilloso si este tipo de espectáculos estuviera menos costoso, para que no solo la gente que tiene medios pudiera ir a verlo, qué tal si por ahí existe un talento escondido y ve lo que es realmente el ballet y le gusta”.
“No nada más ver el espectáculo, sino que el gobierno dijera ‘saben qué, academias de danza, vamos a traer a un maestro reconocido y vamos a dar un curso a equis costo, yo les aseguro que muchos maestros íbamos, aunque fuera caro”.
Asimismo, Carolina indicó que faltan espacios más accesibles en cuanto a costo para la práctica del ballet:
“Antes había una Casa de la Cultura, yo di clases ahí y eran muy accesibles todas las colegiaturas, pero, teníamos el apoyo del Instituto Nacional de Bellas Artes en aquel entonces, ahora no existe ni siquiera el Cinart Pilar Rioja de la antigua estación de ferrocarril, que era otro lugar que ofrecía colegiaturas muy baratas, creo que nos queda el Centro Cultural José R. Mijares y es el único con precios accesibles”.
Para concluir, Carolina Morales se mostró contenta porque existe una fecha para conmemorar lo que representa el ballet en el mundo:
“Me encanta que ahora se conmemore el Día Mundial del Ballet, me da mucho gusto que exista y que no solo uno como maestro lo sabe, sino todas las chicas y chicos que se dedican a la danza, yo les digo que es maravilloso que tengan una educación extraescolar, fuera de lo que es la prepa, la secundaria, la carrera, es maravilloso porque no nos va a dejar cosas malas, sino cosas buenas, en todo lo que es el trabajo de nuestro cuerpo, de nuestra mente”.