¿Las estrellas de mar tienen cabeza? Estudio resuelve el gran misterio

Un estudio recientemente publicado en la revista científica 'Nature' podría ofrecer una respuesta fascinante a este enigma evolutivo

Fernando Escobar | El Sol de La Laguna

  · viernes 3 de noviembre de 2023

Un estudio recientemente publicado en la revista científica 'Nature' podría ofrecer una respuesta fascinante a este enigma evolutivo. / Foto: Especial | Archivo Pixabay

Las estrellas de mar, esas criaturas marinas misteriosas y hermosas, han desconcertado a científicos y entusiastas de la naturaleza durante siglos. La pregunta en torno a cuál es la "cabeza" de una estrella de mar ha dejado perplejos incluso a los expertos más sagaces. Sin embargo, un estudio recientemente publicado en la revista científica 'Nature' podría ofrecer una respuesta fascinante a este enigma evolutivo.

A lo largo de su historia, las estrellas de mar han sido consideradas sin una cabeza definida, lo que ha desconcertado a los naturalistas. Pero según la investigación realizada por las Universidades de Stanford y Berkeley, lideradas por Chan Zuckerberg Biohub San Francisco Investigators, a lo largo de su desarrollo evolutivo, las estrellas de mar transforman su anatomía y se convierten en seres cuya estructura se asemeja más a una cabeza que a un cuerpo.

El estudio ha identificado firmas genéticas relacionadas con el desarrollo de la cabeza en estrellas de mar juveniles en casi todas las partes de su cuerpo, mientras que los genes que codifican el torso y la cola parecen haber desaparecido. Un hallazgo sorprendente reveló que firmas moleculares típicas de la porción frontal de la cabeza se encontraban en el centro de cada uno de los brazos de la estrella de mar, y con el tiempo, estas firmas se desplazaban hacia la parte posterior de los extremos de los brazos.

"Es como si la estrella de mar está completamente sin tronco y se describe mejor como simplemente una cabeza que se mueve a lo largo del suelo marino", comentó Laurent Formery, académica de Biohub y autora principal del estudio. La experta agregó que esta conclusión desafía las suposiciones previas de los científicos sobre estos animales.

A lo largo de los siglos, la extraña disposición corporal de las estrellas de mar ha desconcertado a los científicos que intentan comprender su evolución. En lugar de mostrar una simetría bilateral, las estrellas de mar adultas y otros equinodermos relacionados carecen de una cabeza o cola definida. Diferentes hipótesis han propuesto que el eje que va de la cabeza a la cola se extiende de la espalda del animal a la zona debajo de la barriga o que cada uno de los cinco brazos corresponde a una copia del eje convencional de cabeza a cola.

Sin embargo, debido a que los métodos tradicionales para detectar la expresión genética no funcionan bien en el tejido de las pequeñas estrellas de mar, resolver estas incógnitas ha sido un desafío. El biólogo marino Christopher Lowe, de la Universidad de Stanford, y su equipo desarrollaron una secuenciación de alta fidelidad para obtener datos precisos de trazas de ADN del tamaño de un gen intacto, lo que aceleró el proceso y lo hizo más económico.

Estos investigadores pudieron secuenciar los genomas de las estrellas de mar y utilizaron un enfoque llamado transcriptómica espacial para ver qué genes estaban activos en ubicaciones precisas de los organismos. Los resultados sugieren que las estrellas de mar, y los equinodermos en general, experimentan un desacoplamiento dramático de las regiones de la cabeza y el tronco a lo largo de su evolución.

Este estudio despierta nuevas interrogantes y revela una faceta sorprendente en la historia evolutiva de las estrellas de mar, cuyos antepasados fósiles parecen haber tenido cuerpos más completos. El enigma de la cabeza de la estrella de mar, lejos de resolverse, se ha convertido en un área de investigación fascinante que abre nuevas puertas para entender la evolución de estas peculiares criaturas marina.