¿Bolsas de papas llenas de aire? Ciencia explica porqué

. La situación parece ser una táctica maliciosa para ahorrar dinero de las empresas, pero la realidad es que tiene un por qué científico

Fernando Escobar | El Sol de La Laguna

  · miércoles 11 de mayo de 2022

La situación parece ser una táctica maliciosa para ahorrar dinero de las empresas, pero la realidad es que tiene un por qué científico. / Foto Pexels

Una de las botanas favoritas de mucha gente son las papas fritas o papas, su presentación en bolsa suele ser muy recurrida para darte este ‘gustito’. Esto no evita que existan quejas o problemas por el hecho de que gran parte de la bolsa está llena de aire, y solo un pequeño porcentaje son las papas. La situación parece ser una táctica maliciosa para ahorrar dinero de las empresas, pero la realidad es que tiene un por qué científico. Te explicamos.

Una de las experiencias menos agradables cuando compramos un producto comestible es que al abrir una bolsa de frituras, esta contiene más aire que frituras. Esto se ha prestado constantemente en las redes sociales para la creación de memes, y más bromas, argumentando que es un truco de las empresas productoras. Sin embargo, por mucho que nos cueste aceptarlo, esa cantidad de aire tiene una función en particular para mantener en perfecto estado el producto alimenticio, y tiene que ver con su conservación.

Hay que entender que estos productos son muy especiales, ya que debido a su naturaleza, resultan frágiles y muy susceptibles a perder su integridad, además de ponerse rancios muy fácilmente cuando son expuestos a la luz y oxígeno. Ya que las grasas saturadas que contiene reaccionan más fácilmente con el oxígeno del medio.

Para evitar esto, los fabricantes emplean bolsas opacas que sirven como barrera para la luz (de ahí que todas o en su mayoría sean “metálicas”), así como también de nitrógeno gaseoso, que es el gas que hace que tu bolsa de chips se vea llena de puro aire. Todo esto genera un ambiente y una atmósfera que protege a la fritura.

Miguel Ángel Lurueña, doctor en Ciencia y Tecnología de los alimentos se refirió a este caso en su libro ‘Que no te líen con la comida’: “En el caso concreto de las patatas fritas normalmente se utiliza nitrógeno, que es un gas incoloro, inodoro, insípido e inerte, es decir, no reacciona con otros compuestos y es seguro para la salud. Para lograr que esa atmósfera protectora sea efectiva, la relación entre el volumen de gas y el volumen de alimento debe ser igual o superior a dos, lo que explica que en las bolsas haya tanto «aire» y tan pocas patatas. De paso, así se protege el producto frente a roturas por impacto o aplastamiento, es decir, sirve como «airbag…”