Todos los días, personas de todas las edades y ascendencias comparten la cruda realidad de esperar una donación de órganos. Existen muchos factores que pueden impedir el trasplante, por ejemplo, la compatibilidad del tipo sanguíneo entre el paciente y el donante. Por ello, muchos pierden la esperanza de obtener alguna oportunidad.
Recientemente, se identificaron enzimas capaces de transformar los glóbulos rojos del grupo sanguíneo A al grupo universal O. Tras este suceso, un grupo de investigadores experimentaron combinando las enzimas con el propósito de deshacerse del antígeno A de los pulmones de donantes humanos a través de un método conocido perfusión pulmonar ex vivo (EVLP).
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“Hay alrededor de 100,000 pacientes en las listas de espera de trasplantes de órganos de EE. UU.”, comparten los autores en su artículo. “Estos pacientes requieren órganos que deben ser compatibles con sus principales antígenos de superficie celular”.
“Debido a esto, los pacientes con órganos que fallan progresivamente a menudo esperan años para recibir un trasplante que les salve la vida, y algunos mueren, sin recibir nunca un órgano compatible de manera óptima. En 2017, menos de un tercio de los pacientes en la lista de espera de trasplante de pulmón recibieron un órgano en los Estados Unidos”.
Por fortuna, las enzimas FpGalNAc desacetilasa y FpGalactosaminidasa lograron abrir un abanico de oportunidades para cambiar ese aspecto.
Del total de pulmones de donantes, aproximadamente el 55 % presenta el tipo sanguíneo O en la actualidad. Con este nuevo procedimiento, el equipo espera que dicha cifra se eleve al 80 % con el paso del tiempo.
¿POR QUÉ IMPORTA EL TIPO DE SANGRE PARA LAS TRANSFUSIONES Y TRASPLANTES?
Las transfusiones de sangre y de plasma se deben examinar con profundidad para evitar una reacción inmunitaria. Antes de que cualquier persona obtenga la donación, tanto la sangre como la persona que la recibe se evalúan cuidadosamente para comprobar que existan semejanzas y descartar diferencias. Una reacción, por lo regular, se presenta debido a un error de escritura que hace que alguien reciba sangre incompatible.
El hecho de estar expuesto a otro tipo de sangre puede ser bastante grave. Los grupos sanguíneos siempre deberán ser compatibles para evitar una reacción por la incompatibilidad ABO.