En el mes de mayo del año 2008, una plaga de ratas atemorizó a todos los habitantes del ejido Cleto, en el municipio lagunero de San Pedro de las Colonias, Coahuila; no solo fue por la presencia abundante de los roedores, sino porque en poco tiempo, ya había cobrado la vida de dos menores de edad.

Ya algunos habitantes comenzaban a abandonar la comunidad a causa de la pobreza extrema que ahí se vivía y esta situación hizo que más pobladores huyeran de Cleto, dejando en el lugar todo su pasado.

• También te puede interesar | Clausuran una carnicería con plaga de ratones y cucarachas en Torreón

Aunque era común en esta comunidad la presencia de ratas, nunca se había tenido como tal una plaga en esa magnitud; estaban atemorizados, porque ya no era solo cuestión de la presencia de animales desagradables, sino un riesgo letal para su salud.

Solo unas 30 personas quedaron en ese ejido, los demás se fueron ante el temor de caer contagiados; muchos eran los casos sospechosos y ya había personas fallecidas.

Entre varias personas, incluyendo autoridades, habitantes y el comisariado ejidal que estaba al frente de la comunidad en aquel entonces, Alfredo González Picazo, realizaron acciones como encalado de árboles y viviendas; muchas de ellas ya estaban en abandono.

Los decesos en Cleto

La causa de los decesos fue confirmada, se trataba de leptospirosis, enfermedad que se genera por una bacteria que se encuentra en la orina de las ratas. En ese tiempo, la Jurisdicción Sanitaria número 7 se encontraba analizando otros posibles casos, ya que había varios pacientes con los mismos síntomas; muchos fueron confirmados, pero no todos resultaron en muerte.

Cada vez eran más los habitantes que presentaban signos como diarrea, vómito, alta temperatura y dolor estomacal; la intensidad de estos puede aumentar hasta el grado de provocar lesiones hemorrágicas, agudas o renales.

Fueron menores de edad las víctimas de esta plaga, se trató de René Flores Ortiz de 17 años de edad y Alexis Cortés Ramírez de 9 años, ambos con domicilio en este ejido del municipio de San Pedro, Coahuila.

Las acciones preventivas

Cuando se presentó esta emergencia sanitaria en aquel poblado sampetrino, las autoridades estatales establecieron un cerco epidemiológico en comunidades aledañas, mantuvieron estricta vigilancia de los casos sospechosos y se hicieron muestreos entre un alto porcentaje de la población.

Las autoridades trataron de apoyar a la gente en todo momento para mantener la calma y tratar de erradicar la plaga antes de que cobrara más víctimas; todos colaboraban, se unió Protección Civil, las autoridades epidemiológicas, del ejido, la Jurisdicción, aplicaban con frecuencia veneno y cal en todos los lugares necesarios. Tenían varios puntos estratégicos en toda la comunidad y cada una de las viviendas, para realizar estas acciones y combatir la plaga.

Interviene la federación

Para seguir en las labores y conseguir el objetivo de erradicar la plaga en cleto, al lugar arribaron cuadrillas del área de Epidemiología de la Secretaría de Salud a nivel Federal, a fin de brindar apoyo a la Jurisdicción Sanitaria número VII y apoyar en las acciones combativas y preventivas.

Se realizó la supervisión de toda la zona, recorrieron y analizaron el ejido, supervisaron los estudios que hizo la autoridad estatal; acudió una empresa especializada en el control de plagas para brindar asesoría en el tema de los roedores; señalaron que el problema no era tan fuerte, sino que en gran medida el problema era que en la comunidad las condiciones higiénicas no eran adecuadas.

Se dio la indicación de aplicar dos tipos de raticidas especiales, uno para exteriores y otro para el interior de las viviendas; se aplicaron periódicamente por determinado tiempo que fue de uno a dos meses aproximadamente. Incluso, se capacitó al personal de vectores de la jurisdicción local para que realizaran estos trabajos con buenos resultados.

En 2008, una plaga de ratas hizo que los habitantes de un ejido en San Pedro huyeran por temor a adquirir la enfermedad de leptospirosis