Utilizando el pez diablo, considerado una plaga en el sistema lagunario de la región, una alumna del Conalep Tampico generó un abono para la tierra, por lo que se ha hecho merecedora a diversos reconocimientos a nivel nacional.
Perla Monserrat Hernández encontró en una tarea el impulso que su creatividad necesitaba para convertir una problemática en una solución para el campo, utilizando como herramientas sus manos, desechos, un horno antiguo y oxidado, llevó a cabo su idea.
Te puede interesar: ¿Neurocirugía en la prehistoria? El descubrimiento de Ephraim Squier
Pez diablo es ahora un beneficio para el campo
La alumna del quinto semestre de la especialidad de químico industrial en el Conalep, elaboró con restos de pez diablo, frutas, café y otros productos, un fertilizante para plantas al que bautizó como “Fishtilizante”, que le valió el segundo lugar en el Concurso Nacional Solve for Tomorrow 2022, patrocinado por Samsung.
“Investigué y por nuestra zona queda mucho desecho de pescado, se tiraba al mar y era un foco de infección, fue cuando dije que el pescado es rico en fósforo y bueno para las plantas, ahí me topé con el pez diablo” detalló la joven estudiante.
En una visita al mercado de La Puntilla la estudiante escuchó, por parte de los pescadores, sobre la problemática que representaba esta especie invasora.
“Se comían huevecillos de otros peces, habían quedado desempleados por este pez”, con esta premisa y con el apoyo de su maestra tomó como elemento principal para el fertilizante esta especie y se volvió un éxito.
Proyecto con mucho potencial de la alumna del Conalep
Con los resultados obtenidos por su proyecto, Perla destacó que seguirá investigando más sobre su producto que ve lejos de terminar, pues considera aún se encuentran diversas áreas donde pueda exprimir más su potencial.
“El siguiente paso es hacer mejor las cosas, mejorar el proyecto y seguir investigando porque siento que todavía me falta para mejorarlo y buscar una beca para ir a estudiar a una buena universidad, prepararme mejor y seguir en competencias” concluyó.
Por su parte, la maestra Sonia Elisa Castillo Salinas, con 20 años de experiencia como docente en el área de química industrial, quien acompañó a Perla a la elaboración de este proyecto, considera que es un verdadero orgullo y satisfacción hacer crecer a mentes talentosas.
“Me llena de orgullo ver que nuestros jóvenes que son a veces de escasos recursos, llegan a recibir maestrías, doctorados en química industrial y terminan hasta en China, siendo profesionales destacados” detalló.
Su labor consiste en brindarles las oportunidades para que los educandos exploten su creatividad y ellos solos descubran la pasión por la ciencia y la innovación, con proyectos completamente reales y aplicables en su entorno.
Con "Fishtilizante" resolverán plaga del pez diablo
Aproximadamente hace 15 años, este pez empezó a ser un problema para el ecosistema del sur de Tamaulipas como para los pescadores ribereños, ante la proliferación de la especie considerada caníbal que ha ido mermando la vida de otras.
Entre las soluciones que se ofrecieron en su momento fue aprovecharlo para consumo, pero ante lo duro de su piel, que incluso es considerada una coraza, el aprovechamiento de la carne era complicado.
Además “en la investigación resultó que si contiene unos metales pesados, pero como tal consumirlo no es un problema, solo que si es muy rico en fósforo, por lo que yo lo vi más provechoso su uso para la agricultura” señaló la entrevistada.
Esta especie lleva aproximadamente 15 años generando problemas a los pescadores de Tampico e incluso en la zona norte de Veracruz.
Puede desplazarse fácilmente entre ríos y lagunas, alimentándose de huevecillos que recoge del lecho, lo que afecta la reproducción de otras especies; además se ha descubierto que puede vivir fuera del agua por varias horas.
Como dato adicional, este pez adquirió su nombre cuando fue visto por primera vez en la presa El Infiernillo, en Michoacán, aunque estudios han revelado que pertenece a la cuenca del Amazonas.
Logros como los de Perla Montserrat, alumna del Conalep de Tampico, superan las limitaciones y adversidades y proponen ideas disruptivas que generan un cambio en la sociedad, en este caso la posibilidad de acabar con el pez diablo, plaga que ha generado gran daño al ecosistema y la producción pesquera regional.
Nota originalmente publicada en: El Sol de Tampico