En medio de una pandemia y de resurgimientos de enfermedades antiguas que representan un daño a la salud humana, el mundo vuelve a recibir una sacudida, ya que en zonas de España y Estados Unidos se han registrado casos de pacientes positivos al virus del Nilo, el cual transmite una enfermedad que de no ser tratada a tiempo puede ser mortal para el hombre, por lo que autoridades sanitarias están en alerta.
Un hombre de 61 años de Alpine, se confirmó en ser la primera persona en el condado de San Diego en este 2020, en dar positivo al virus del Nilo Occidental, reportó la Agencia de Salud y Servicios Humanos del Condado de San Diego (HHSA, por sus siglas en inglés).
El hombre fue hospitalizado, y se le administró la prueba, y el Departamento de Salud Pública del Condado confirmó el caso el 11 de agosto, señaló la HHSA. Él viajó a Yuma, Arizona, donde se cree que contrajo el virus, señaló la HHSA.
De acuerdo a datos, el 80 por ciento de las personas que se infectan con el virus del Nilo Occidental nunca lo saben y nunca sufren de ningún síntoma. Aproximadamente una de cada cinco personas infectadas desarrolla fiebre y otros síntomas como dolor de cabeza, náuseas, fatiga, erupción cutánea o inflamación de los ganglios. Y aproximadamente 1 de cada 150 personas infectadas podría enfermarse gravemente y morir.
Ataca a España
El virus del Nilo, sospechoso de haber contagiado a 16 personas que permanecen ingresadas por meningoencefalitis en Sevilla, es transmitido por la picadura de un mosquito, el 'Aedes japonicus', infectado que ya porta el virus, aunque es importante recordar que no todos los mosquitos están infectados y que no todas las personas que son picadas por un mosquito infectado contraerán el virus.
Los síntomas principales de la fiebre del Nilo son similares a los de la gripe: dolor de cabeza, vómitos, fiebre, aparición de erupciones cutáneas o cansancio. No obstante, si se trata de una encefalitis o meningitis los signos de alarma son dolores de cabeza, fiebre elevada, rigidez de nuca, estupor, desorientación, coma, temblores, convulsiones, debilidad muscular y parálisis, detalla la OMS.