Durante el inicio del año pasado, en Netflix salió un documental llamado ‘Escena del crimen: Desaparición en el Hotel Cecil’ en el que se relata el caso de la joven Elisa Lam quien en el 2013, cuando tenía apenas 21 años, apareció muerta en la cisterna del Hotel Cecil, en Los Ángeles, luego de estar poco más de dos semanas desaparecida. Las circunstancias de su desaparición y fallecimiento fueron tan extrañas que parecían propias de una película de terror.

El caso se hizo muy popular en medios por algunos videos de la joven horas antes de su desaparición dónde aparecía en un elevador haciendo cosas que no eran comunes en su comportamiento y actuando de manera muy extraña; minutos después deja de aparecer en cámara y desde ese momento no se supo nada de ella.

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¿Quién era Elisa Lam?

Elisa Lam era una estudiante canadiense, de padres de origen Chino, que tenía 21 años de edad al momento de su desaparición y posterior fallecimiento; ella había visitado Estados Unidos porque quería visitar Los Ángeles; era una ciudad que llamaba mucho su atención y quería conocer el lugar. Elisa se hospedó en el Hotel Cecil.

El Hotel Cecil es conocido por tener una mala reputación, pues en él se han hospedado asesinos seriales, además de que dentro de él también han realizado algunos tipos de rituales satánicos y han ocurrido algunos crímenes dentro.

La joven hizo el viaje completamente sola y para no preocupar a sus padres, ella se comunicaba con ellos constantemente. Diario les llamaba, mandaba mensajes e incluso hacía videollamadas con ellos por Skype para que pudieran sentirse más tranquilos y les contaba cómo le estaba yendo en el viaje.

De pronto, de un día para otro, Elisa Lam dejó de contactarse con sus padres, lo que no era común para ellos por lo que intentaron comunicarse varias veces con ella sin resultado y empezaron a preocuparse. Posteriormente los padres de Elisa decidieron ir a la policía para reportar la desaparición de la joven.

La policía de Los Ángeles llegó al Hotel Cecil y revisó la habitación de Elisa Lam, sin embargo, no había nada fuera de lo normal. No se encontraron señas de violencia, entradas forzadas, sangre, o alguna cosa que pudiera ayudar a las autoridades a tener alguna pista de lo que pudo haber pasado, por lo que decidieron retirarse del lugar sin hacer ningún esfuerzo más por buscarla.

Caso Elisa Lam: ¿Qué pasó con ella?

El caso aparentemente estaba pasando sin pena ni gloria, la policía no estaba buscando nada y sus padres se preocupaban cada vez más. Pero de pronto, un hallazgo inesperado en el hotel, haría que las autoridades de Los Ángeles pusieran toda su atención en el caso de Elisa Lam.

El 19 de febrero del 2013, varios huéspedes comenzaron a quejarse por el sabor del agua, decían que tenía un sabor y olor horrible, además de que al momento de bañarse, el agua salía un tanto viscosa y de tonalidades marrones, por ello, los encargados del hotel decidieron ir a ver lo que estaba pasando.

Los encargados del hotel revisaron uno por uno los tanques de agua (eran cuatro) y en el último tanque que revisaron, encontraron el cuerpo de Elisa Lam ya en descomposición, pues llevaba más de dos semanas ahí dentro.

En ese momento, los encargados decidieron llamar de nueva cuenta a las autoridades y revisar las cámaras de seguridad del hotel, donde encontraron algunos videos de la joven teniendo algunos comportamientos extraños.

En los videos de la cámara de seguridad, se ve a la joven ingresando a un elevador y es entonces donde empieza a actuar de manera no convencional. Elisa Lam parece que se está escondiendo de alguna cosa, pues empieza a asomarse varias veces, luego entra y sale del ascensor en repetidas ocasiones y en ciertos momentos se va a las esquinas del elevador como para que alguien no la vea; se le puede ver con mucho miedo.

Luego de algunos minutos de la joven dentro del elevador, ella sale del lugar y la puerta se cierra. Después de eso, no se tienen imágenes registradas en las cámaras del hotel.

Autoridades, durante las investigaciones, y luego de ver los videos de las cámaras de vigilancia, dedujeron que el caso de Elisa Lam pudo tratarse de un suicidio pues la joven no tenía ninguna seña de violencia física, ni sexual, ni forcejeos, solamente había muerto por ahogamiento. Según ellos, la joven tenía algunos problemas mentales, los cuáles podrían dar explicación a sus comportamientos en el elevador. A pesar de ello, en el cuerpo de la joven no encontraron rastro de medicamentos, drogas o alcohol.

Su familia y amigos negaron totalmente los hechos, pues ellos comentaban que Elisa Lam nunca había tenido comportamientos de ese tipo y nunca había tenido que asistir a algún psicólogo o psiquiatra.

Teorías alternativas del caso Elisa Lam

Una de las teorías alternativas que se tiene es que pudo tratarse de algo paranormal, pues era muy difícil, por no decir imposible, el que cualquier huésped del hotel pudiera subir a la azotea del lugar, debido a que para poder subir ahí necesitas una llave específica y al entrar, debes marcar una contraseña en uno de los aparatos, de lo contrario una alarma empieza a sonar, sin embargo, ese día no sonó ninguna alarma.

Algunas personas creen que la joven pudo estar poseída al momento de su desaparición y que inclusive estaba viendo algún tipo de fantasma mientras estaba en el elevador, pues se puede ver claramente que se esconde de algo pero nunca podemos ver de qué. Además, Elisa, mientras estuvo dentro del ascensor, trata de cerrar varias veces las puertas sin éxito alguno y justo cuando ella sale, las puertas se cierran y abren un par de veces sola para posteriormente quedarse cerradas definitivamente.

Además de todo, es casi imposible que ella pudiera entrar por sí sola a la cisterna, pues las tapas eran exageradamente pesadas, tanto que cuando estuvieron revisando los tanques, las tapas eran levantadas por dos hombres; es por ello que por su contextura física era imposible que pudiera levantar la tapa, meterse ella por su propio pie y posteriormente volver a colocar la tapa para quedarse encerrada ahí dentro.

Sin duda este caso está lleno de misterio y de inconsistencias, esperemos que muy pronto se reabra el caso y se pueda saber qué fue lo que en verdad pasó.

Nota publicada originalmente en: El Heraldo de Chihuahua