La familia Delgado Vidaña perdió todos sus bienes en un incendio de su vivienda, ubicada en la colonia Nueva Los Ángeles.
Claudia Vidaña tenía a su hijo Christopher, de 25 años de edad, en el hospital recibiendo quimioterapia. También su otro hijo, Jesús, estuvo varias horas acompañando a su hermano, cuando decidió ir a casa; cuando llegó vio las llamas por el baño, asustado y desesperado, intentó abrir para sacar principalmente a sus perritas y después, para tratar de hacer algo por evitar que las llamas arrasaran con todo a su paso.
Nada de esto fue posible, Widow, una de las perritas se resguardaba asustada debajo de una cama y logró salir con vida, aunque intoxicada, pero Pitilinga, la consentida de Jesús ya había fallecido bajo el fuego.
Con esta familia vivía la abuelita, Leticia, pero horas antes la hermana de Claudia fue por ella para llevarla a su casa; es una persona de la tercera edad y en ese momento pensó en recogerla para que no estuviera sola mientras el resto de la familia estaba en el hospital. Pero esto, la salvó de ser otra víctima más del voraz incendió.
Muchas pérdidas materiales
“Nuestra casa quedó en muy malas condiciones, una recámara muy dañada, las otras no, pero todo lo demás se quemó; refrigerador, estufa, microondas, muebles, adornos, fotos, todos los recuerdos que teníamos”, comenta Claudia.
Al llegar a casa, Claudia rompió en llanto y gritos de desesperación, ve su casa y se siente desconsolada al saber que perdió todo y no saber dónde vivir o cómo volver a recuperar sus pertenencias.
“Me duele mucho porque nuestras cositas se perdieron, quedó poco pero de todos modos me dio mucha tristeza; gracias a Dios que no estábamos y que todo fue pérdida material pero sí es muy triste ver cómo quedó todo destruido”.
El techo se cae a pedazos, las puertas se quemaron, perdieron casi todos los muebles, las ventanas con sus marcos y mosquiteros, mucha ropa y todo lo que había dentro de la cocina.
“Nos quedó nada más lo de dos recámaras pero la otra no y de los demás se nos quemó todo, hasta la lavadora se chamuscó, los adornos y hasta las fotos que yo tenía de mi papá o de la familia”
Familia recibe apoyo
La jefa de esta familia, comentó que el pasado miércoles acudió personal del municipio para hacer el retiro de todos los artículos y materiales quemados en la vivienda, hicieron algunas labores de limpieza y retiro de escombro y ceniza.
“Gracias a Dios aún tenemos nuestra casita pero aún no se puede habitar en ella, se siguen cayendo partes del techo, huele mucho a quedado, hay material suelto, todavía faltaría mucho trabajo por hacer para poder regresar”, dijo Claudia.
“A mi hijo además de cáncer y de estar con quimioterapia, le cayó agua en los pulmones y estaba mal, pero ya la sacaron, va mejorando pero en las condiciones en las que está la casa no podía meterlos ahí y menos a él”.
Las autoridades municipales que han acudido, además de acudir a hacer las labores mencionadas, han llevado también despensas, cobijas y prometieron regresar a realizar otros trabajos en la casa.
Los vecinos también han sido un gran apoyo para ellos, los ayudaron en todo momento y de diferentes maneras, desde tratar de reducir el incendio, hasta el apoyo moral y llevando al veterinario a la perrita intoxicada, a quien lograron salvarle la vida.
“Son otra familia para nosotros, nos han apoyado al 100 y sin ese apoyo no sabemos dónde y cómo estaríamos; nos estamos quedando en la casa de al lado porque es gente que con frecuencia está fuera de la ciudad y nos ofreceiron muy amablemente su vivienda”.
Claudia y su familia están tristes, pero no desconsolados; han recibido muestras de apoyo y cariño de mucha gente, uno de sus hermanos comentó que esto sería para ver llegar algo mucho mejor y que con la ayuda de todos, las cosas mejorarán.
“Y mi hijo va bien gracias a Dios con su tratamiento, es muy lento pero ahí va poco a poco; pues se fue todo lo de la casa incluyendo el medicamento y las vacunas de mi hijo que estaban refrigeradas, también la insulina de mi mamá, pero en el seguro le dan su tratamiento afortunadamente y podrá seguir”.
Una pérdida muy triste
Jesús que es el hijo mayor de claudia aún sigue impresionado y sobre todo muy triste; fue quien presenció todo y trató de ayudar a sofocar el incendio con la manguera sin tener éxito; sobre todo, para él lo más difícil fue aceptar la partida de Piti; la perrita era su fiel compañera desde pequeña y hasta dormía con él, ha estado triste y llorando por ella, mientras Widow se recupera en casa de una vecina de la fuerte intoxicación que sufrió.
“El sigue todavía con la impresión, porque tuvo que brincarse y dice le calaba lo caliente y se quitaba, pero le gritaba a las perritas y no salían; después le dijeron que la Widow porque estaba abajo de la cama pudo sobrevivir pero la otra se dice que le cayó un mueble encima, pero luego que se había quemado”.
Para Claudia es una pérdida muy importante la de las integrantes peludas de la familia; eran las consentidas del hogar, acostumbradas a los mimos, a dormir en las camas y a estar en casa todo el tiempo como reinas.
Vecinos estaban impactados
Paula se encontraba dormida en casa la madrugada del martes, cuando de pronto comenzó a escucharse mucho ruido y se levantó al ver el movimiento; frente a su vivienda, ubicada en la privada Segunda A de la colonia Nueva Los Ángeles, la casa de los vecinos se encontraba ardiendo en llamas.
No lo podía creer y sentía una gran desesperación de ver cómo el fuego iba consumiendo todo, poco a poco; no había nadie en casa en ese momento, solo la pequeña amiga peluda de la familia, quien perdió la vida atrapada entre las llamas.
Para Paula el impacto fue muy fuerte y más aún después de ver que sus vecinos perdieron todo en ese siniestro. “Todos los vecinos estábamos impactados y yo en shock; la casa quedó destruida y se perdió casi todo al interior, los medicamentos de, la ropa, muebles”.
Por tal motivo, Paula está organizando una colecta y hace un llamado a toda la población de la Comarca Lagunera para que se solidaricen con ella pero principalmente con esta familia que está pasando por una tragedia.
Está solicitando cualquier tipo de apoyo que pueda ser de utilidad para poder ayudar a sus vecinos, desde ropa, comida, calzado, dinero o lo que pueda sumar.
Hace el llamado a todas las personas de buen corazón que quieran apoyar a la familia afectada con sábanas, despensas, muebles o cualquier cosa que puedan aportar.
“Son hechos que a veces uno no merece y yo pienso que es una familia demasiado buena que es para nosotros un dolor impresionante pensar en su desesperación; quisiéramos que las cosas no hubieran pasado así, todos los vecinos tratamos de ayudar y ahora de brindar apoyo en lo que podamos”.
La ciudadanía que esté interesada en apoyar a la familia Delgado Vidaña, puede hacerlo a través de Paula Ayme Santoyo García a la cuenta BBVA 4152314176229295 o directamente en su domicilio que es privada Segunda A número 908, colonia Nueva Los Ángeles; el número de contacto para cualquier duda o información es 8719212667 con la misma joven.