Torreón, Coahuila.- A casi ocho años de que fuera inaugurado el moderno Hospital General Torreón, dependiente de la Secretaria de Salud en Coahuila, su enemigo número uno, siguen siendo las lluvias, pues año con año sus paredes, plafones, equipos, insumos y hasta pacientes, sufren por las fuertes goteras que se registran al interior del nosocomio, y las cuales nadie ha podido frenar.
Lo anterior pudo ser constatado por El Sol de La Laguna en un extenso recorrido que realizó al interior del Hospital General, pues desde su entrada principal se observan partes de techo de sin plafón, humedad en las paredes y plafones humedecidos.
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“Ya tenemos muchos años así, siempre nos dicen lo mismo que ya va venir gente de Saltillo y que ahora sí solucionarán este problema, que radica en fallas desde su proceso de construcción, colocación de planilla e impermeabilización”, expresó uno de los trabajadores del área de mantenimiento.
“Cada que llueve, es lo mismo, se nos gotean todos los pasillos de las áreas de hospitalización, quirófanos y consulta externa, la última lluvia que se tuvo fue el sábado y ustedes pueden constatar que se sigue goteando”, explicó una de las enfermeras de estas áreas.
El Hospital General Torreón cuenta con 11 mil metros cuadrados de techo, para los cuales se requieren unos cinco a seis millones de pesos para su proceso de impermebealización total, no en partes como siempre se ha hecho.
“Hay que levantar la planilla mal colocada y volverla a poner de manera uniforme con su impermeabilizantes de buena calidad y duración, solo así se resolverá esto, no con parches” dijo otro de los trabajadores.
FILTRACIONES DE SIEMPRE
El director general del Hospital General Torreón, Favio, reconoció que de nueva cuenta se tuvieron importantes filtraciones, lo cual no es algo nuevo, pero que les sigue causando problemas.
Desde que se inauguró, se gotea, esto es cada año, viene gente de Saltillo se impermeabiliza una parte y se van.
“Se han enviado muchos oficios previniendo la temporada de lluvias, para que se hagan los trabajos con tiempo, pues no es un presupuesto que sale del hospital, pues es mucho dinero, estamos hablando de once mil metros cuadrados, tenemos un problema estructural, pues hay que levantar una capa y luego volver a ponerla, entonces es una inversión considerable”, explico
AFECTACIONES
Lo que más se gotea en el Hospital General son los pasillos de hospitalización, algunos encamados y la consulta, eso es lo que más riesgo corre cada que llueve.
El año pasado se goteó un quirófano, le dieron prioridad y lo arreglaron, y ahora ya no se goteó.
Cada vez que llueve hay que proteger los equipos más costosos, estamos en un hospital ancho, de una sola planta, y el trabajo que requiere debe ser parejo, pues cuando existen estas filtraciones en un punto, vienen a parar hasta el otro extremo, recalcó.
Los equipos en riesgo son los ventiladores de terapia intensiva, los refrigeradores en el banco de sangre, los insumos de los quirófanos, eso es sin duda lo más costoso, advirtió el director del hospital general.