Luz fantasma en carretera de EU: Un fenómeno que ni el Ejército pudo descifrar

Desde el siglo XIX, la luz fantasma se aparece en la zona limítrofe de Missouri y Oklahoma, sin que hasta el momento haya una explicación de su presencia

José Gómez | El Heraldo de Tabasco

  · martes 15 de noviembre de 2022

Los avistamientos de la luz fantasma iniciaron en 1831. Foto: Cortesía | loudog42

Una luz se aparece en la zona limítrofe de Missouri y Oklahoma, Estados Unidos desde el siglo XIX, sin que hasta el momento quienes han estudiado el tema, entre ellos el Ejército, tenga certeza de lo que es, surgiendo varias explicaciones, de acuerdo a un texto de la BBC.

El spooklight, Hornet Spook Light, Hollis Light y Joplin Spook Light son los nombres que le han dado. Tan indeterminado como su lógica es el número de luces, hay relatos que mencionan una; otra, varias.

En 1831 comienzan a registrarse los avistamientos, historias orales que fueron pasando de una persona a otra y de un pueblo en pueblo. Sin embargo, es en 1881 que se documenta el suceso y en 1936 se pública en el periódico Kansas City Star.

¿A qué conclusión llegó el Ejercito de Estados Unidos sobre la luz fantasma?

Al comenzar a difundirse el caso por los medios impresos de comunicación, el Ejército de Estados Unidos le toma interés. Así, en 1946, su cuerpo de ingenieros lo estudió, llegando a la conclusión que era una “luz misteriosa de origen desconocido”.

El primer artículo publicado del fenómeno es de 1936. Foto: Cortesía | Loudog42

Un ‘boom comercial’ surgió en las décadas de los 60 y 70, cuando una tienda de Hornet dio a conocer el fenómeno, atrayendo ala zona a turistas. Por aquella época era común ver largas filas de autos estacionados en la carretera Missouri-Oklahoma.

¿Qué forma tiene la luz fantasma?

Así como su origen, la forma y color de la luz o luces son inciertas. Entre las personas que aseguran haberla visto, se dice que son anaranjadas, rojizas o amarillentas; de forma redondeada o como una linterna de campamento que se eleva unos metros de la superficie.

Lo lugareños también han contribuido a la cadena de argumentos que intentan desentrañar el misterio, a través de leyendas, todas en el terreno de los paranormal, las cuales señalan que los spookligth son almas de nativos americanos o un minero que busca a sus hijos, robados por los indios.

Hay quienes sostienen que la luminosidad viene de los faros de los autos. Cortesía | loudog42

¿Qué relatan los habitantes de los pueblos cercanos?

Vance Randolph es uno de los que afirma haberse topada con la luminosidad: “Yo he visto esta luz en tres ocasiones. Primero apareció del tamaño de un huevo, pero varió hasta que a veces parecía tan grande como una bañera”. Su encuentro lo llevó a escribir un libro en 1947: ‘Ozark: Magia y Folclore’.

Dean Walker de Kansas City, mencionó: “Mi padre, mi madre y mi tía, nos llevaban a menudo a mis primos y a mí encontrar la luz fantasma, una vez incluso pasó flotando por el parabrisas de nuestro automóvil (…) estábamos tan asustados que nadie dijo nada”.

Grace Goodeagle, mujer de la tercera edad del pueblo indígena Quapaw dijo: “Una noche, cuando tenía 10 años, mi tío me llevó a mis hermanos y a mí (…) una luz brillante apareció a la distancia en lo profundo del bosque”.

La ruta 66 es una de las carreteras donde se ha visto el fenómeno. Foto: Cortesía | loudog42

¿Por qué hay quienes afirman que son luces de auto?

Pese al convencimiento de estas personas qué algo extraño pasó en la carretera, Robert Cannon, escritor, sostiene que las luces son faros de automóviles, llegando a la conclusión al encender las de su auto mientras un amigo se colocó en otro parte de la cinta asfáltica, a un distancia considerable. De acuerdo con este, el avistamiento coincidió con el momento que se encendieron las luces de la unidad.

La presencia del objeto no tiene una explicación plausible, pero sus historias asombran, como reconoció Chery Eichar Jett, autora de ‘Ruta 66 en Kansas’: Esperé durante una hora en la oscuridad y, aunque la luz fantasma nunca apareció (…) lo que había leído amplió tanto mi expectativa que las luces de un auto que me pasó cerca me asustaron”.

Nota publicada originalmente en: El Heraldo de Tabasco