Con la llegada del calor, un visitante indeseado hace su aparición en los hogares laguneros: el mosquito, o como aquí lo conocemos: "moyote". Pero, ¿por qué llamamos así a este insecto en nuestra región? La respuesta nos sumerge en un fascinante viaje a través de nuestra historia y nuestro lenguaje.
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¿Qué significa moyote?
La palabra "moyote" tiene raíces profundas en la lengua náhuatl. Proviene de "móyotl", que significa mosquito. Este término, utilizado por los antiguos mexicas, viajó a través del tiempo y el espacio hasta llegar a nuestra región, donde se arraigó de tal manera que se convirtió en parte de nuestra identidad.
El historiador lagunero Carlos Castañón relata una anécdota que ilustra la curiosidad que despierta esta palabra. En una ocasión, un escritor de la Ciudad de México le preguntó qué eran los "moyotes". Castañón se vio obligado a reflexionar sobre el origen de este término tan arraigado en nuestra región y descubrió que no era exclusivo de La Laguna.
El escritor Saúl Rosales, en su libro "Jales sobre el habla lagunera", destaca la importancia de la palabra "moyote" como un verdadero "tesoro literario". Rosales analiza cómo este término, que nació en el mundo mexica, fue adoptado por los laguneros y se convirtió en una parte integral de nuestro léxico.
Pero, ¿cómo llegó exactamente esta palabra a La Laguna? Aunque no existe un registro preciso de su trayecto, se puede inferir que fue a través de los contactos entre las culturas indígenas y españolas, y posteriormente, a través de los movimientos migratorios y los intercambios comerciales.
Más allá del moyote: palabras únicas en La Laguna
El habla lagunera es un mosaico de palabras y expresiones que reflejan nuestra historia y nuestra cultura. Además del "moyote", encontramos términos como "achis", "anda", "asquel", "bien pica", "bordo", "bronca", "cachar" y "chapuza". Cada una de estas palabras tiene su propia historia y su propio significado, y todas ellas contribuyen a enriquecer nuestro lenguaje.
"Achis", por ejemplo, es una expresión de duda o incredulidad, similar al "no lo creo" en otras regiones. "Anda" se utiliza para expresar asombro o sorpresa, como en la frase "Anda, te la bañaste". Y "asquel" es una palabra sencilla para referirse a una hormiga pequeña, pero que en La Laguna tiene un significado muy preciso.
