Torreón, Coahuila. – La semana pasada se dio a conocer la información de que Nueva Zelanda llegó a cien días sin presentar casos de ciudadanos contagiados por Covid-19, situación que ha logrado contener debido a un buen despliegue de operativos y estrategias de seguridad que han sido llevadas a cabo a la perfección en el país oceánico.

Con diversas estrategias de cooperación y apoyo entre población y autoridades gubernamentales, el país con una población cerca a los cinco millones de habitantes, se han convertido en un país ejemplar para combatir la propagación del Covid-19, situación que alecciona a la república mexicana, pues cuenta con casi 10 estados con una población similar a la del territorio neozelandés.

Algunos de los estados de México con población similar a la de Nueva Zelanda son: Puebla con, Guanajuato, Chiapas, Nuevo León, Michoacán, Oaxaca, Chihuahua, Guerrero, Tamaulipas, Baja California, Coahuila, quienes reportan desde casi tres millones de habitantes hasta Puebla que supera los seis, por lo que sin duda un solo país como Nueva Zelanda, ha logrado contener el virus, tarea que para 10 estados de la República Mexicana ha parecido complicado, en gran parte, por la desobediencia civil.

Pero, vamos a conocer las razones y circunstancias que han ayudado a este país a llegar a cien día sin presentar casos de contagios en sus ciudadanos: Nueva Zelanda comenzó a implementar un plan contra el coronavirus en febrero, que incluía la preparación de hospitales para la afluencia de pacientes. También comenzó a instituir políticas de control fronterizo para retrasar la llegada de la pandemia.

El gobierno implementó un estricto bloqueo en todo el país (designado Nivel de Alerta 4) el 26 de marzo, basado en una estrategia no de mitigación sino de eliminación . Después de cinco semanas, y con el número de casos nuevos disminuyendo rápidamente, Nueva Zelanda pasó al Nivel de Alerta 3 por dos semanas adicionales, lo que resultó en un total de siete semanas de lo que era esencialmente una orden nacional de permanencia en el hogar.

A principios de mayo, se identificó el último caso conocido de Covid-19 en el país y la persona fue puesta en aislamiento, lo que marcó el final de la propagación comunitaria identificada. El 8 de junio, el gobierno anunció un paso al Nivel de Alerta 1, declarando así efectivamente el fin de la pandemia en Nueva Zelanda, 103 días después del primer caso identificado.

Nueva Zelanda se encuentra ahora en la etapa posteliminación, que viene con sus propias incertidumbres. Los únicos casos identificados en el país se encuentran entre los viajeros internacionales, todos los cuales se mantienen en cuarentena administrada por el gobierno o en aislamiento durante 14 días después de la llegada para que no comprometan el estado de eliminación del país.

La Primera Ministra, Jacinda Ardern, brindó un liderazgo empático y comunicó de manera efectiva mensajes clave a los ciudadanos, destacando la lucha contra la pandemia como el trabajo de un “equipo de cinco millones”, lo que resultó en una alta confianza pública y adhesión a las medidas. Para mitigar los efectos económicos adversos, el gobierno instituyó un programa de gastos para apoyar a las empresas y complementar los ingresos de los empleados que perdieron sus trabajos o cuyos trabajos se vieron amenazados.

Por lo que sin duda, las acciones emprendidas, guardando su respectiva comparación con las entidades federativas en México, son de gran ejemplo para combatir al peligroso virus, que hasta el momento ha matado a más de 50 mil mexicanos, posicionando al país como el tercer lugar mundial con más decesos, en tanto que el país oceánico no para de 25 fallecidos.