Desde un lonche de adobada, hasta acompañando un rico menudo, el pan francés es esencial en la gastronomía lagunera y una alimento que sí o sí debes probar en tu visita a la región. Pero ¿de dónde surgió? ¿Por qué se llama Pan Francés? Todo lo que necesitas saber sobre esta perla gastronómica típica de la Laguna.
Pese a que muchos turistas podrían confundirlo con el tradicional bolillo, la realidad es que el pan francés tiene un sabor inigualable y, según los panaderos de la región, solo se consume y elabora en La Laguna. Suave por dentro y dorado por fuera, según los expertos del pan, se elabora en un horno de ladrillo, arena y cascajo, lo que da su sabor inigualable.
Origen del pan francés
Su origen no está del todo claro, pero se cree que allá, por el año 1703, un grupo de frailes franciscanos que vivían en una región pesquera de Europa, decidieron hacer un pan que imitara la forma de las conchas de caracol que pululaban en aquella región.
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Se dice que 200 años más tarde, Don Teófilo Fuentes Cantú, llegó a San Pedro de las Colonias y fundó la panadería ‘La popular’ donde e comenzó a realizar esta receta que perdura hasta nuestros días.
Panadería ‘La Popular’
Fundada por Don Macario Fuentes Cantú, nacido un 12 de febrero de 1878 en Villa de García, Nuevo León, llegó a San Pedro de las Colonias junto a su hermano Teófilo para abrir una sucursal, en plena época de la Revolución, en aquel lugar en la Avenida Guerrero y la Calle 5 mayo.
Se dice que Don Macario era muy enérgico con quienes trabajaban en su panadería, siempre en la búsqueda de hacer el mejor pan, pero que también se distinguía por ser una persona alegre, servicial y humilde. Al fallecer Don Macario el 12 de febrero de 1972 a la edad de 94 años, hacer el pan ya era una tradición familiar que continuó su hijo Oscar Fuentes Carrillo.
Al fallecer Oscar, La Popular y recetas tradicionales quedaron en manos de sus trabajadores. La receta tradicional lleva ingredientes comunes, como harina blanca de trigo, levadura, azúcar (que le da el toque dorado), sal y agua. Su preparación comienza con mezclar los ingredientes, estos se amasan, luego se dejan fermentar y aumentar su tamaño gracias a la levadura.
La masa se corta en pequeñas porciones que luego son cubiertas con harina y extendidas sobre una mesa con rodillo. Se doblan en la forma del pan y son acomodados en el dorso de una tabla de madera para apilarse antes de pasar al horno. Con último toque antes de ser horneados, se les pasa un brochazo de agua en la parte más dorada del pan.
¿Por qué se llama Pan francés?
Se cree que el pan francés tiene más de 90 años en la región. Distintos relatos afirman que los laguneros le dieron el nombre de pan francés gracias al parecido que tiene la masa madre con un pan típico de Francia: el baguettes.
