Uno de los momentos más recordados de la época de violencia en nuestro país es el ataque al Casino Royale en Nuevo León. El hecho consternó a todo el país por la cifra de más de 50 personas fallecidas. En 2021 se cumplió una década de esta masacre. ¿Qué pasó? Te contamos todo sobre el ataque al Casino Royale, la terrible masacre ocurrida en 2011 en Monterrey.
El 25 de agosto de 2011 la casa de apuesta ubicada en la ciudad de Monterrey fue víctima de una atentado terrorista que dejó un saldo de 52 personas fallecidas, entre ellas una persona embarazada. El incidente es uno de los más letales durante la llamada ‘Guerra por el Narco’ emprendida por el ex presidente Felipe Calderón en 2006.
El casino Royale San Jerónimo fue inaugurado en noviembre de 2007. Se localiza en el cruce de las calle Jesús María González y la avenida San Jerónimo, y era propiedad de empresarios mexicanos.
Previo al ataque, habían sufrido de dos situaciones similares. En enero de 2011, se difundió mediante medios de comunicación que el negocio había sido víctima de la delincuencia organizada cuando un comando armado había entrado a las instalaciones sometiendo a las personas presentes. Este hecho fue negado por el que entonces era su apoderado legal.
Otro hecho parecido fue la madrugada del 25 de mayo de ese mismo año cuando fue asaltado por un grupo de delincuentes que realizó detonaciones con armas de fuego, apoderándose de dinero de clientes y del establecimiento, siendo uno de los varios casinos atacados ese día.
El 4 de mayo de 2011 el casino había sido clausurado por el Municipio de Monterrey por carecer de los permisos para ampliar sus instalaciones, reabriendo sus puertas el 31 de mayo debido a un amparo de los propietarios ante al Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Estado, alegando que se trataba de una remodelación
Ataque al Casino Royale
Ese día de agosto del 2011, un grupo de entre 13 y 16 causaron intencionalmente un incendio en el negocio, dejando 52 personas muertas y 10 lesionados. Minutos antes de las 2 de la tarde más de 12 personas integrantes de "Los Zetas" junto a alguno de sus jefes se reunieron en el restaurante "El Gran Pastor" en la ciudad de Monterrey. Para las 3 de la tarde salieron del restaurante con dirección a una gasolinera para cargar bidones con gasolina, posteriormente, se enfilaron a la avenida Gonzalitos, con dirección al casino.
El ataque habría ocurrido alrededor de las 15:50 horas, siendo causado por varios hombres armados, que bajaron de cuatro automóviles. Uno de ellos golpeó a la joven de la recepción con un arma, gritando "ya se los cargó la v**ga", para posteriormente realizar disparos.
En el lugar robaron las pertenencias a algunos de los clientes, y empezaron a destruir algunas de las máquinas y rociar al menos 4 bidones de gasolina en el área de bingo. Según testimonios contradictorios de testigos hubo una explosión al menos de una granada en el recinto.
Algunos de ellos logrando salir por la puerta principal, pero siendo imposible conforme las llamas crecían. La desesperación ocasionó que algunas personas fueron pisoteadas por la estampida, mientras las salidas de emergencia permanecían cerradas con llave.
Todas las víctimas murieron asfixiadas por intoxicación por monóxido de carbono, escondidas en los baños y oficinas luego de tratar de huir de los agresores subiendo al segundo piso del establecimiento donde no había salida de emergencia.
Quienes atacaron al Casino Royale en Monterrey
El acto ocasionado fue atribuido al crimen organizado, del cual en un principio se tenían dos principales, el Cártel del Golfo y Los Zetas, quiénes se disputan el área. Posteriormente se confirmó era el segundo.
El 29 de agosto, el gobernador de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, informó de los primeros cinco detenidos por el incendio en el casino. Los sujetos confesaron haber participado en el crimen en el que murieron 52 personas.
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Explicaron que no querían matar a nadie, sólo querían asustar a los dueños del local, pues no querían pagar una cuota semanal de 130 mil pesos para poder operar. La situación se les fue de control.
