Torreón, Coahuila.- A sus tan solo 23 años de edad, Luis Roberto Romero Rivera, lleva 10 partos fortuitos, es decir, fuera de un hospital.
Fue en el 2014 cuando ingresó a la Cruz Roja de Torreón y actualmente es coordinador de Capacitación de la benemérita institución y está por terminar su Licenciatura en Medicina General.
“Desde que estaba en la secundaria me puse como objetivo el ser médico”.
De los partos atendidos, le ha tocado ayudar a dar a luz tanto en ambulancias como en casas particulares.
En un hospital se tienen todo el material, equipamiento y hasta el personal para contribuir a que una mujer dé vida, sin embargo fuera de un nosocomio la situación es más complicada.
“En un nerviosismo intenso cuando llegas y te das cuenta que la paciente ya no tiene tiempo de llegar a un hospital. Ahí es donde tiene que aplicar todo el conocimiento y trabajar el bebé y la mamá sobrevivan”.
De los 10 casos que suman, todos se han desarrollado con bien, pues tanto la mamá como el recién nacido han quedado con vida.
“Los familiares están felices que ya viene el bebé, pero yo me estreso porque no se sabe qué pasará, estoy contracorriente, pues puede haber problemas con el cordón o que salga primero otra parte que no sea la cabeza”.
Zaragoza Sur, Las Fuentes y Santiago Ramírez, son algunas de las colonias en donde ha atendido partos y ayudado a dar vida.
“Otro caso que recuerdo fue el de una señora que venía en una ambulancia de Viesca, nos hablaron para interceptar pero ya venía en trabajo de parto. Le pedí a mi compañero que frenara la ambulancia porque ya estaba naciendo el bebé”.