Cada vez pasamos más tiempo delante de una pantalla, ya sea la del ordenador, la de una tableta o la del propio móvil. Horas. Muchas horas, concretamente una media de once. Por no hablar de las que estamos viendo la televisión o las que vamos a pasar estos días de encierro involuntario. Y, claro, los ojos se resienten. Las consultas por fatiga ocular –picor, enrojecimiento, lagrimeo, visión borrosa e incluso dolor de cabeza– se han multiplicado en los últimos años precisamente por el «mal uso» y «abuso» que hacemos de los dispositivos electrónicos. Se trata del llamado síndrome visual informático, que no es otra cosa que «un trastorno provocado por el sobreesfuerzo de los ojos como consecuencia de un uso prolongado de las pantallas», explican en la clínica Baviera.
En la mayoría de las ocasiones no llegamos a ser conscientes de los problemas oculares que nos puede acarrear el fijar la mirada en exceso. «En reposo, el ojo está enfocado para ver de lejos y a una distancia media de manera natural. Mantener el enfoque en un objeto que se encuentra a una distancia corta supone un esfuerzo adicional que se debe sostener durante un tiempo determinado, por lo que, inconscientemente, la media de parpadeos por minuto baja y esto se traduce en sequedad en los ojos y fatiga visual», explican en la Sociedad Española de Oftalmología.
Una de las técnicas más utilizadas para tratar el síndrome visual informático es la regla 20-20-20, que consiste en que cada 20 minutos apartemos la mirada de la pantalla y miremos a un objeto situado a una distancia de 20 pies –algo más de seis metros– durante un periodo de 20 segundos. De esta manera, logramos que los ojos no estén enfocando tanto tiempo seguido a corta distancia y la vista descansa. Existen en el mercado aplicaciones para móvil como ProtectYourVision y EyeCare que nos ayudan a seguir la regla del 20-20-20, creada por el oftalmólogo Jeffrey Anshel.
Además de variar la distancia focal cada cierto tiempo, otro consejo tan obvio como útil es que no nos olvidemos de parpadear. Los seres humanos parpadeamos unas 18 a 25 veces por minuto, pero los estudios demuestran que cuando estamos delante de una pantalla los movimientos se reducen a la mitad. «Y la disminución del parpadeo produce ojo seco, la patología más habitual por el uso abusivo de dispositivos electrónicos», señalan en la clínica Baviera. En estos casos, los oftalmólogos recomiendan el uso de lágrimas artificiales y no abusar de las lentes de contacto.
Otra recomendación para evitar la fatiga ocular es sentarse a una distancia de unos 60 centímetros de la pantalla y ubicarla de manera que su visión se dirija hacia abajo. Optimizar la resolución de pantalla y trabajar siempre con una iluminación de ambiente adecuada y bajo ningún concepto hacerlo a oscuras también contribuye a rebajar el síndrome visual informático.