La pastilla del día después es un método anticonceptivo que puede ser utilizado en casos de emergencia con el propósito de evitar un embarazo no deseado, ya que interrumpe el proceso de la ovulación.

Este medicamento contiene levonorgestrel y su venta es libre, lo que quiere decir que no se necesita receta médica para adquirirla. Su finalidad es prevenir el embarazo después de una relación sexual en la que no se utilizó preservativo alguno o el método empleado haya fallado.

No se recomienda su consumo de manera rutinaria, pues existen métodos anticonceptivos menos “agresivos” para el organismo como las pastillas anticonceptivas.

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¿Cómo funciona la pastilla del día siguiente?

Su uso está destinado a la administración vía oral y su práctica es efectiva en muy poco tiempo. A pesar de su nombre, puede funcionar incluso después de 72 horas del acto sexual, aunque se recomienda ingerirla lo más pronto posible en caso de recurrir a este anticonceptivo.

¿Cuántas veces se puede utilizar la píldora de emergencia?

Solo debe tomarse en casos de emergencia y no se recomienda que su uso sea cotidiano. Por recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la dosis debe ser única e inmediata después de una relación sexual ya que cuenta con una gran carga hormonal y llega a alterar el ciclo menstrual.

¿Qué tan efectivo es este método anticonceptivo?

Su efectividad va a depender del tiempo transcurrido desde el coito y el momento del ciclo menstrual por el que la mujer esté pasando en ese momento, aunque diversos estudios han descubierto que las estimaciones de su efectividad es de un 85 %, pero otras investigaciones han visto una tasa de embarazos de mujeres usando la píldora de entre 1.2 % a 2.1 %.

¿Cuáles son los efectos de su uso continuo?

La pastilla del día siguiente no genera daños ni enfermedades como cáncer, infertilidad ni abortos. Sin embargo, puede llegar a producir efectos secundarios como dolores de cabeza, náuseas, vómitos, dolor en el bajo vientre, sensibilidad en los senos y sangrado vaginal.