Las ganas de descansar y el cansancio extremo pasan por alto cuando por fin consigue conciliarse el sueño y las piernas se mueven de manera incontrolada.
El síndrome de las piernas inquietas quita el sueño a mexicanos de todas las edades.
Los pacientes de este síndrome refieren que sienten cosquillas, hormigueo, comezón o dolor durante las noches.
El neurólogo especialista en enfermedades neurodegenerativas José Ángel Balderas Juárez dice que es “como sensación de choques eléctricos, sensación de que algo les quema, una sensación que a veces es indescriptible para ellos”.
Las mujeres, particularmente de 35 años en adelante, embarazadas o con enfermedades crónicas suelen ser las más afectadas.
Según precisó el experto en la materia, esto es ocasionado por la falta de un transmisor llamado dopamina, que tiene que ver con el control del movimiento.
Es indispensable acudir con un especialista para aminoras los síntomas del síndrome.