¿Sientes que eructas demasiado o que tienes un exceso de gases? Muchos de estos gases no son más que aire que ingresó al estómago y está siendo expulsado. Según datos del colegio americano de gastroenterología un 7% de la población tiene exceso de eructos o gases que provienen del estómago y en promedio una persona expele entre 10 y 20 gases al día.
Los factores relacionados a estos movimientos intestinales son variados: la cantidad de aire tragado, la eficacia del tracto gastrointestinal para expeler el aire y gases; y la cantidad de gases producidos por bacterias que habitan el colon y actúan en los alimentos no digeridos por completo.
Así como existen alimentos que generan muchos gases por la cantidad de fibra, existen productos o comidas conocidos por ocasionarlos como: las lentejas, las habas y los frijoles. También hay que comprender que cada cuerpo es distinto en cuanto a sensibilidad o tolerancia a cantidad de gases retenidos. Hay persona que no producen suficiente cantidad de lactasa (Enzima necesaria para descomponer la lactosa) y no pueden digerir completamente alimentos con lactosa (azúcar en leche), por lo que esta llegará parcialmente digerida llegará al colon, donde las bacterias la descomponen y producen gases.
¿Qué alimentos producen gases?
Dentro de los más comunes están los ya mencionados: Lentejas, habas y frijoles. Pero otros que también pueden causarlos son la fruta, las verduras y los alimentos altos en fibra, como los cereales integrales. También las bebidas carbonatadas, como las gaseosas o cervezas, contribuyen al aumento de gases en el estómago.
Tus hábitos alimenticios, como comer demasiado rápido, masticar mucho chicle o hablar mientras se mastica, hacen que tragues más aire y este llegue hasta tu estómago.
El exceso de gases ¿Es un problema?
En muy pocas ocasiones el exceso de gases se atribuye a enfermedades graves en el tracto digestivo, como el síndrome de dumping o la insuficiencia pancreática, pero si estos gases son muy molestos, al grado de no poder realizar sus actividades normales, y si encuentras otros síntomas como dolor abdominal, vómito, diarrea, estreñimiento, pérdida de peso, sangrado gastrointestinal y, en ocasiones, acidez estomacal lo ideal es acudir al médico para una revisión más detallada.
¿Cómo prevenir los gases?
Como ya explicamos arriba: el tener gases no es algo malo o de que preocuparse, por más desagradables que puedan ser. Pero se pueden tener precauciones para no tener problemas gastrointestinales, cuidar tu dieta en general, o lavarse las manos antes y después de comer, así como desinfectar las frutas y verduras antes de consumirlas evita que bacterias no deseadas lleguen a tu aparato digestivo y te generen algún tipo de problema.