Las nuevas generaciones están más acostumbradas a exponer o transmitir sus vidas en las redes sociales, ya sea escribiendo lo que hacen, publicando una foto de dónde están o qué comen, esta sobreexposición ha sido muy comentada y debatida, sin embargo parece ser algo que llegó para quedarse.
Una cosa es publicar tu vida en Twitter, Facebook o Instagram, y otra es hacerlo con tus hijos, a este fenómeno moderno se le está llamando “sharenting”. Todos conocemos a un amigo o amiga que publica fotos de su bebé, que se le cayó el diente, aprendió a caminar, cumplió 5 meses etc., pero lejos de ser un motivo de mofa, ha sido analizado por psicólogos y sus opiniones no son positivas.
La fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo), explica que la palabra “sharenting” proviene del inglés share (compartir) y parenting (paternidad), cuyo significado es documentar y compartir en redes todo lo que hacen los hijos desde que son pequeños.
También lee: Estás obligado a dar pensión alimenticia a tus papás
Hasta ahora, no había existido una generación de niños con una infancia tan pública, esto a futuro puede generar problemas en la relación padre-hijo o bien, convertirse en algo normalizado
Javier Puyol, experto en derecho tecnológico, en una entrevista para Confilegal explicó “En el examen de esta cuestión se ha de partir de una realidad plenamente constatable, consistente en el hecho de la utilización por parte de los padres de las redes sociales o de internet para proporcionar información acerca de los hijos, tiene que tener unos determinados límites, que cuando se sobrepasan ponen en riesgos la seguridad global de sus propios hijos”.
Agregó que el hecho de subir vídeos o imágenes referente a los hijos en la red, les crea una huella digital sin su consentimiento. De igual manera comentó que se pueden exponer a los peligros que acarrea el propio internet.
En las plataformas digitales, tales publicaciones son localizadas geográficamente y se convierten en material público sin ninguna restricción.
Hay que aclarar un punto importante, el hecho de compartir una foto familiar no es de ninguna manera “sharenting”, se le llama así cuando se documenta constantemente la vida del pequeño.
Hay otro concepto que puede ser confundido con el anterior, y es “oversharing”, la diferencia con éste es que se limita solo a la persona que sobreexpone su vida en las redes sociales de manera obsesiva.
Publicado originalmente en El Sol de Hermosillo