Las lluvias torrenciales han azotado a La Laguna, dejando a su paso inundaciones en diversos sectores de la ciudad que representan un gran peligro para nuestros vehículos. Es por ello que resulta fundamental conocer cómo actuar ante estas situaciones para evitar daños mayores y garantizar nuestra seguridad.
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Antes de la tormenta
Prepara tu vehículo: Realiza una revisión completa de tu automóvil antes de que comience la temporada de lluvias. Verifica los niveles de aceite, líquido de frenos y refrigerante, así como el estado de las llantas, los limpiaparabrisas y las luces.
Organiza tus documentos: Guarda en un lugar seguro y seco todos los documentos importantes relacionados con tu vehículo, como la tarjeta de circulación, el seguro y el manual del propietario.
Identifica rutas alternativas: Investiga rutas alternativas que puedas tomar en caso de que las calles se inunden.
Durante una Inundación
Evita cruzar zonas inundadas: La profundidad del agua puede ser engañosa. Si no estás seguro de si puedes cruzar, es mejor buscar una ruta alternativa.
Si debes cruzar:
Mantén una velocidad constante: Evita acelerar o frenar bruscamente.
No cambies de carril: Mantén tu vehículo en el mismo carril y evita realizar maniobras bruscas.
Observa a otros vehículos: Presta atención a cómo otros vehículos están cruzando la inundación. Si ves que tienen dificultades, es mejor esperar.
No te detengas en medio del agua: Si tu vehículo se detiene en medio de la inundación, no intentes encenderlo de nuevo. El agua puede haber entrado al motor y causarle daños irreparables.
Después de una Inundación
Seca tu vehículo: Una vez que hayas cruzado la zona inundada, seca lo más pronto posible las partes inferiores de tu vehículo, como los frenos y el sistema de escape.
Revisa los niveles de fluidos: Verifica los niveles de aceite, líquido de frenos y refrigerante. Si notas alguna anomalía, consulta a un mecánico.
Prueba los frenos: Realiza varias frenadas suaves en un lugar seguro para asegurarte de que los frenos funcionen correctamente.
Revisa el interior: Abre las puertas y ventanas para que se seque el interior del vehículo. Aspira el agua y cualquier residuo que haya quedado.
Busca signos de daños: Revisa cuidadosamente el vehículo en busca de cualquier signo de daño, como arañazos, abolladuras o fugas.
¿Qué daños pueden causar las inundaciones a mi vehículo?
Las inundaciones pueden causar una variedad de daños a tu vehículo, incluyendo:
Daños en el motor: El agua puede entrar en el motor y causar cortocircuitos, óxido y daños en los componentes internos.
Corrosión: El agua salada puede acelerar el proceso de corrosión en las partes metálicas del vehículo.
Problemas eléctricos: Los sistemas eléctricos del vehículo pueden dañarse por la exposición al agua.
Moho y hongos: La humedad puede provocar el crecimiento de moho y hongos en el interior del vehículo.
¿Qué hacer si tu vehículo se inunda por completo?
Si tu vehículo se inunda por completo, lo mejor es llamar a una grúa y llevarlo a un taller especializado. No intentes encenderlo ni conducirlo hasta que un mecánico lo haya revisado.
