El uso de cubrebocas, aislamiento social y las medidas de higiene, han sido puntos clave para “controlar” los contagios por Covid-19 entre la población mientras se obtiene una vacuna que sea capaz de contrarrestar los efectos del virus.
Y es que, aunque en un principio se señaló por parte de las autoridades de salud que el crear la inmunidad en las personas mediante sucesivos contagios hasta que logren tener anticuerpos contra el coronavirus, obtener la vacuna en un periodo corto de tiempo sigue siendo el reto.
Por lo anterior, el mes de noviembre fue decisivo, pues se dieron a conocer resultados de Pfizer, datos sobre la vacuna de Oxford-Aztrazeneca; y la vacuna rusa Sputnik V que anunció nuevos resultados.
A pesar de esto, una investigación publicada en The New England Journal of Medicine dio a conocer que el uso de cubrebocas seguirá siendo clave importante para controlar la pandemia, ya que ayuda a “reducir la gravedad de la enfermedad y garantizar que una mayor proporción de nuevas infecciones sean asintomáticas”.