¡Todo fue un error! Estos negocios empezaron como un accidente

Descubre el origen de la Coca-Cola y otras marcas que ahora son mundialmente exitosas

Marielos Martín del Campo | El Sol de La Laguna

  · viernes 18 de marzo de 2022

Coca-Cola / Foto: Pexels

Dicen que a veces lo que no se planea sale mejor, y así fue cómo le ocurrió a estas personas, quienes son la mente detrás de exitosos productos como la Coca-Cola, la Penicilina, los Post-its y el Cereal. ¿Quieres conocer su historia?

Coca-Cola

Iniciamos con el origen de la Coca-Cola, una bebida creada por John Pemberton, que comenzó siendo un jarabe hecho de vino y extracto de coca que utilizado para dolores de cabeza, a este lo llamó “Vino francés de coca de Pemberton”.

Para 1885, la venta de alcohol quedo prohibida en Atlanta, por lo que el químico estadounidense tuvo que optar por hacer una nueva bebida que incluyera únicamente el jarabe de coca y agua carbonatada, convirtiéndose en lo que hoy conocemos como la Coca Cola.

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Post-it

Post-it / Foto: Pixabay


Otro marca que inicio sin propósito alguno fue la de Post-it, cuando Spencer Silver diseñó un adhesivo con poca adherencia, se dio cuenta que no había algo en lo que él pudiera darle uso, sin embargo, tiempo después el investigador Art Fry quedó cautivado con la idea y se dio cuenta que este material adherible podía ser utilizado para pegar los separadores en sus libros.

En 1980, los Post-its fueron lanzados a la venta en Estados Unidos y recibidos con gran éxito por el público.

Kellogg’s

Los hermanos John y Will Kellogg comenzaron a realizar experimentos en la búsqueda de un platillo más saludable para la humanidad, en una ocasión, mientras intentaban hervir granos para hacer granola, olvidaron el maíz dentro del horno.

Este descuido los llevo a tostar el maíz nuevamente, y así tener como resultado una consistencia ligera y crujiente nombrada como cereal, uno de los desayunos más populares en la actualidad.

Penicilina

Alexander Fleming realizó cientos de experimentos para poder crear una droga mágica que curara enfermedades. Pese a sus intentos, no fue hasta que se deshizo de todo que pudo dar con su objetivo.

En 1928 el médico y científico noto que una placa de Petri que había desechado, tenía un moho que disolvía las bacterias que lo rodeaban, en el descubrió un impresionante antibiótico que podía aliviar diferentes tipos de dolencias, se trataba de la penicilina.