Después de tatuarse el nombre de su primer hijo, un hombre descubrió que su esposa le había sido infiel, por lo que el niño no era de él.
Al enterarse de que iba a ser padre, el joven colombiano de 22 años decidió celebrarlo con un gran tatuaje en la espalda. Sin embargo, nunca se imaginó que el bebé sería fruto de la infidelidad de su pareja.
Además, el joven se enteró de que, tras el parto, su esposa planeaba abandonarlo para irse vivir con el verdadero padre de quien llevaría el nombre de “Benjamin”.
La noticia dio la vuelta por redes sociales, y de inmediato los usuarios comenzaron a realizar comentarios de apoyo para el hombre.