Mujer asegura haber encontrado una rata muerta en su bolsa de papas fritas [Video]

La mujer señaló que la empresa de las papas la contactó para disculparse y mandarle un combo de papas, las cuales dijo no comerá por riesgo a otra rata

Julio Sánchez | El Sol de Puebla

  · miércoles 28 de septiembre de 2022

Foto: Captura de pantalla | Facebook: Esther de la Rosa

Dentro de las malas experiencias con el control de calidad de los productos, una de las peores le ocurrió a una mujer que compartió su historia en Facebook después de que una rata muerta apareciera dentro del empaque de unas papas que compró.

Las papas son de la marca Chip’s de Barcel en su presentación de sal y el video fue compartido por una usuaria originaria de Tampico, Tamaulipas, de nombre Esther de la Rosa.

Cientos de usuarios se unido a la discusión con dudas de que la historia sea real como de otras personas que han sufrido experiencias similares o con peores “ingredientes extra” en el interior de sus productos.

Rata aparece en bolsa de papas fritas

Esther de la Rosa compartió su experiencia el pasado 25 de septiembre, al publicar una transmisión en vivo y un video más donde se muestra el roedor junto a las papas tiradas, mientras viaja en una camioneta acompañada de un hombre y un niño.

En su historia, explicó que decidió detenerse en una sucursal de una tienda comercial para comprar frituras y chucherías. Al abrir la bolsa de papas en su camioneta lo primero que notó fue la rata por lo que su reacción fue aventar el producto al piso y arrinconarse en su asiento por el miedo y asco que le provocó.

“Miren lo que me salió en la chuchería, no me van a creer porque está tirado, porque la abrí y las tiré. En las papas Chip’s me salió una rata… Ni madres que la agarro”, afirmó la mujer. “Abro la bolsa y lo primero que sale es la rata de las papas Chip’s… Tengan mucho cuidado yo ya ni madres que vuelvo a comprar papas Chip’s y de ninguna”.

La aparente rata se ve de tamaño pequeño, ya muerta y sí parece estar calcinada, por lo que Esther bromea que incluso debe estar salada al ser preparada junto a las papas.

Como parte de su video en vivo, la mujer muestra el ticket de compra del producto al tener apenas unos cuantos minutos de haberlas adquirido. También, señaló que tenía mucha ansiedad debido a que no quería volver a tomar las papas para sacar la rata.

“Hay no, que asco, que miedo y que asco”, explica Esther, quien dice que al encontrar una gran cantidad de personas en el centro no encontró un bote de basura o un lugar seguro en donde pudiera tirar las papas con el invitado especial.

En su video señala que no había vivido una experiencia similar, además de mostrar su gran impresión por dos cosas: que las papas hayan costado 20 pesos con todo y rata, y que el animal haya sido procesado dentro del producto sin que nadie lo notara.

“No vengan a decir que mi camioneta está sucia ni nada, porque me la acaban de lavar, o que la rata estaba en mi camioneta. Abrí la bolsa de las Chip’s y de ahí salió la rata… Yo creo que está frita y salada”, defendió la mujer.

¿Cómo siguió su caso tras encontrar la rata?

En una nueva publicación realizada este 26 de septiembre, Esther comentó que Barcel ya se habría acercado a ella como parte de su atención al cliente para recibir informes sobre lo ocurrido.

Explicó que la empresa no le creyó su historia de la rata en sus bolsas Chip’s, pero que le harían llegar una dotación de sus productos como una especie de regalo para resolver la situación.

“Dicen los de Chip’s Barcel que no creen de la rata porque sus estándares de limpieza son extremadamente cuidadosos. Y que me van a mandar un combo de papitas para reponer el trago amargo de esta experiencia. Como si me las fuera a comer ¡sáquense con sus papás con rata!”, escribió la usuaria.

También publicó un caso similar que ocurrió en el 2017 cuando un usuario expuso en Twitter que en una bolsa de papas Chip’s el producto parecía tener excremento de rata. Por ello, la mujer retiró su llamada a ya no consumir de estas frituras y mucho menos darlas a los hijos.

Nota originalmente publicada en: El Sol de Puebla