Desde hace unas semanas en México comenzó la jornada de vacunación contra la Covid-19 dirigida a los menores de 5 a 11 años de edad. De esta manera se busca reducir los contagios, las hospitalizaciones y las defunciones a causa de esta enfermedad que se expandió por todo el planeta en el 2020 y que continúa siendo un problema mundial.

Durante este periodo de inoculación, se hizo viral el video de un niño que fue llevado a recibir este biológico, pues él no quería que lo vacunaran, así que se escapó. El material generó cientos de comentarios de usuarios quienes indicaron que ellos desde muy jóvenes descubrieron que también le tienen miedo a las jeringas.

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Este momento quedó registrado por uno de los presentes, que más tarde lo compartió en plataformas como TikTok, Facebook y Twitter, en donde ya tiene más de 5 millones de reproducciones. Por otro lado, muchos internautas aprovecharon este espacio para hablar de la importancia que tiene este medicamento.

El niño llegó lejos, pero lo detuvieron

En total, el usuario @huberthdarwinsantana compartió dos grabaciones de este hecho, en la primera se ve como el niño está en los brazos de una mujer, él intenta moverse para poder liberarse, mientras tanto, su padre quiere descubrirle el brazo izquierdo. Luego de unos segundos, el hombre que está con él logra cargarlo para meterlo al módulo de vacunación.

En el otro material, el señor que salió en el primer video está persiguiendo a su hijo quien llega a la entrada principal del recinto, pero al notar que hay guardias, decide correr hacia el otro extremo, en donde están formadas las personas que están esperando su turno.

De esta manera, es que el infante va hasta el final de la fila sin que su papá pueda detenerlo, la persona que está grabando no puede captar el punto en el que fue interceptado el menor. Al final se mostró que sí pudieron inmunizarlo.

Hasta ahora los videos han generado más de 200 mil comentarios, dentro de los que resaltan aquellos que dicen haber atravesado por algo similar, pues explicaron que nunca fue fácil para ellos acudir a este tipo de jornadas.

“Yo te entiendo, me refiero al niño”, “normalmente diría ‘por eso no me gustan los niños’ pero vi a muchos adultos haciendo lo mismo y no los juzgo porque también le temo a las agujas”, “yo a mis 49 años siento el mismo pánico que el niñito”, “cuenta la leyenda que (el menor) sigue corriendo hasta el día de hoy”; fueron algunas de las opiniones.

Nota publicada originalmente en El Sol de Puebla.