Sea quien sea el que gane las elecciones presidenciales en México recibirá como herencia una deuda muy pesada, que al cierre de febrero del 2024 alcanzó la cifra de 15 billones 483 mil 774 millones de pesos.
Así lo comentó el economista Marcelo Lara, quien puntualizó que para que la próxima administración federal pueda maniobrar se tiene que bajar este déficit.
“Lo anterior se pudiera hacer con una reforma hacendaria, extender la base tributaria, aumentar la generación de inversiones que implican el cobro de más impuestos para el país, o bien asumir el mismo discurso de cobrarles a los que no pagan”, agrego el integrante de Instituto Mexicano de Ejecutivos en Finanzas (IMEF).
Comentó que lo que ocasionó este desproporcionado crecimiento de la deuda externa e interna de México, fue porque el actual sexenio federal ha sido de muchos programas sociales, de entregar muchos apoyos en efectivo a grupos marginados.
“Creo que al final estos grupos tienen todo el derecho de recibir ese respaldo, pero siento que con la dinámica que se dio pone en riesgo las finanzas públicas.
“Lo anterior es porque es un déficit muy elevados y son muchos los intereses que el país paga de una deuda pública, tanto a bancos internacionales, como en la emisión de deuda que hace el gobierno”, mencionó.
En cuanto al precio del dólar, destacó que este puede terminar el año como esta o ha estado, pero que hay que estar muy pendientes de los procesos electorales, tanto en México como en Estados Unidos.
Ello, en virtud de que el discurso político de las candidatas y de los candidatos en ambos países referente al tema económico puede pegarle al ánimo de los inversionistas.
“Hasta ahora no se han expresado sobre este punto de cómo seria su esquema económico o financiero, pero creo que después, para mayo, es cuando comenzarán a tocar este tema, donde sin duda saldrá a flote lo de la deuda de México que es muy pesada”, agregó.
Precisó que el fortalecimiento del peso es la consecuencia de la enorme entrada de remesas de dólares de connacionales al país, las grandes inversiones que llegan al Norte de México y por el turismo internacional.