La Junta Federal de Conciliación y Arbitraje Número 42 luce como todos los días, con mucho movimiento, no tanto por el tema de los despidos de burócratas, sino por la gran cantidad de demandas que existen de trabajadores que intentan recuperar su AFORE y en algunos casos no les alcanza el tiempo, pues muchos fallecen y es su beneficiario quien tiene que pasar un largo calvario legal para recuperar todo lo que por Ley y por años de trabajo les corresponde.
Y es que existen casos en que han transcurrido de dos a tres años ya con el trabajador fallecido para que su beneficiario pueda alcanzar a recibir lo que se tenía acumulado en su cuenta de AFORE, todo esto en un juicio que se hace largo y tedioso.
El presidente de la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, Francisco Ayala, se negó a brindar la información en torno al número de expedientes que se tienen en esta materia, pues argumentó que ya existe una Ley Mordaza aplicada desde la Ciudad de México que les prohíbe dar información, y en este caso es solo la Dirección de Comunicación de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social la autorizada para brindarla.
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Lo que es un hecho es que los pasillos de esta Junta Federal lucen llenos a diario, pues el tema de la recuperación del AFORE no es cualquier cosa, hay que meterle tiempo y dinero, y pues hay quienes le meten mucho tiempo para que no se queden con el dinero que no les corresponde.
Una alerta importante, para quienes reclaman el regreso del AFORE de una persona que ha fallecido, es que el beneficiario en forma inmediata deberá nombrar también durante el juicio a un beneficiario para que en el dado caso de su fallecimiento este dinero no se quede en manos del gobierno o de la banca.