Si estás pensando en entrar u organizar una tanda para comenzar a ahorrar dinero, tienes que tomar en cuenta que esta idea te podría traer algunas dificultades serias con el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
Si aún no puedes comprender a qué tipo de problemas nos referimos, te explicamos de que se trata y cómo es que puedes evitarlos.
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De acuerdo a las recientes medidas implementadas por el SAT, el recibir una cantidad dinero que no sea común en tus ingresos puede generarte algún inconveniente, esto debido a que los bancos suelen notificar al SAT cuando se reciben depósitos mayores a los 15 mil pesos, dinero que en este caso puede provenir de un ahorro tipo tanda.
Para esquivar una cuestión como la anterior, la mejor opción es manejar tu dinero haciendo transferencias, así no tendrás que ir al banco a depositar grandes cantidades de efectivo que resulten sospechosas.
Por otro lado, el SAT también propone la opción de hacer la declaración anual a todos sus contribuyentes, en la que pueden incluir ingresos provenientes de una tanda sin que esta les genere algún tipo de impuesto.
¿QUÉ ES UNA TANDA?
Una tanda es una forma de ahorro informal que se ha vuelto mayormente popular en México. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) en 2015, cerca de un 32.4 por ciento de la población adulta mexicana ahorra de esta manera.
La función de una tanda se da a partir de un grupo de personas que se organizan para aportar cantidades iguales en diferentes periodos de tiempo establecidos. Posteriormente una persona se encargará de recibir todo el dinero y de entregarlo a sus participantes según sean acomodados los turnos, al final del plazo establecido todos los integrantes habrán tenido oportunidad de recibir la misma cantidad ahorrada.