Saltillo, Coahuila. - Durante el 2020 se presentaron 203 procesos legales en contra de adolescentes, 86 casos más que el año anterior, en donde el delito más concurrido fue el de narcomenudeo, seguido del de robo y el de homicidio, no obstante, solo 21 casos fueron sentenciados, mientras que el resto se resolvieron por soluciones alternas, como la justicia restaurativa.
María Luisa Valencia García, Magistrada de la sala penal de Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE) dio a conocer que los jueces de primera instancia en materia penal también están especializados en materia de adolescentes, por lo que ellos también llevan los procesos de primera instancia en el Centro de Justicia Penal, y que son mínimos los casos, gracias a la prevención de delitos en materia de adolescentes y en segunda instancia los lleva la sala penal del TSJE.
Una de las medidas que ha ayudado a que se llegue poco a la segunda instancia es la Justicia Restaurativa, Acuerdos Reparatorios y Suspensión Condicional.
No obstante, sigue habiendo incidencias legales en donde se ven involucrados adolescentes, ya que durante el 2020 se iniciaron 203 procesos en contra de adolescentes, un aumento significativo en comparación con el año anterior que presentó solo 117 casos.
El Municipio con mayor incidencia, durante el 2020, fue el de Monclova con 72 casos, seguido de Saltillo con 68 casos, mientras que en Torreón se presentaron 20 casos y ocho en San Pedro.
De estos casos el 21 por ciento corresponden al delito de narcomenudeo, el 19 a robos, el 15 a homicidios, el 12 a lesiones, 6 por ciento a violación y también 6 a violación equiparada.
El resto se divide en delitos como secuestro, con un cinco por ciento, al igual que daños dolosos, feminicidio con un tres por ciento y lesiones y daños, funciones en contra de la seguridad, con dos por ciento; mientras que los delitos de desaparición de personas e incendios forestales tienen uno por cinto.
Valencia García dio a conocer que la justicia para adolescentes tiene otra función, es decir no es una justicia de castigo, sino que es una justicia con fines socioeducativos.
“es tratar de que el joven se recupere, se rehabilite y se reeduque para poderlo regresar a la sociedad y tratar que con esto no reincida en una actitud delictiva, por eso no se llegan a la segunda instancia porque se buscan medidas alternas” explicó la magistrada.
Un ejemplo de esto, comentó, fue uno que se presentó en el Distrito Judicial de Torreón, en donde se presentó el primer círculo de paz celebrado a nivel nacional con sede judicial.
Informó que un círculo de paz es la reunión entre la víctima, el imputado, la familia, la sociedad y la escuela, en donde se llega a un arreglo entre las partes afectadas y el responsable.
Este caso se trató de un homicidio entre hermanos, en donde el menor responsable tenía 15 años y dentro del círculo familiar fue en donde cometió el delito, por lo que fue asegurado, pero tras llevar a cabo las investigaciones y la atención a las víctimas indirectas se logró llegar a una media alterna.
Si bien, aún se siguen presentado delitos en donde se ven involucrados jóvenes, sobre todo varones, uno de los objetivos es erradicar conductas delictivas por lo que se busca, por medio de las dependencias Estatales y Municipales, encaminarlos a una vida productiva, cultural y deportiva, con el fin de evitar todos los delitos, sobre todo el del narcomenudeo.