Es de lamentar que la Secretaría de Finanzas del Estado de Durango durante todo el sexenio no han tenido el tiempo ni la capacidad de poder subsanar las deficiencias que tienen para dar de alta a las unidades de taxis a través del en el Registro Público Vehicular (REPUVE) dependencia federal.
Esto ha ocasionado la detención y aseguramiento de unidades sobre todo del vecino Estado de Coahuila, afectando en tiempo y en lo económico a los agremiados, dijeron Víctor Sánchez Pulido, Carlos Michel Sánchez Aldana y Gerardo Vázquez representantes de la Unión Regional de Sindicatos de Transporte de la Región Lagunera (UNIRET).
Ellos mostraron gran preocupación por los concesionarios del servicio público, en este caso los del ramo de taxis por esta y otras situaciones que atraviesan y que afectan al gremio.
Dijeron que en la Laguna de Durango circulan alrededor de 4 mil unidades de taxis, de las cuales el 30 % no están ingresados al REPUVE, aún cuando tienen todo en regla.
Han acudido a las oficinas de Recaudación de Rentas en esta ciudad lagunera, pero lo único que les indican del por qué no los suben al portal de este registro nacional es porque no tienen la clave del sistema.
Lamentaron que se presente esta situación que está afectando la economía de los trabajadores del volante, a pesar de cumplir todos los requisitos.
Resaltaron que esta deficiencia que se da es un problema entre la autoridad estatal y la federal.
"Primeramente es que en la Secretaría de Finanzas del Estado no ingresa al REPUBE las unidades de taxi que faltan, de ahí que no aparecen en el portal federal, lo cual lo han aprovechado las autoridades del vecino Estado de Coahuila, específicamente de la región lagunera donde se supone que es una zona metropolitana, pero esta figura solamente es de membrete o se usa sólo cuando les es conveniente”.
Aseguraron que son las policías de las diferentes corporaciones quienes han detenido a taxis que tienen que cruzar para la parte de Torreón y que al revisarlos en el REPUVE y no estar ingresados, los quieren consignar o los arreglan económicamente, afectando el bolsillo del chofer, pues les piden entre mil 500 y 2 mil pesos por cada unidad que detienen en estas circunstancias.