Gómez Palacio, Durango.- En octubre del año pasado, el síndico municipal con licencia, Omar Castañeda, calificó como incompetente al auditor superior del Estado, Francisco Javier Guevara Morales, porque en palabras del funcionario “le pasó de noche” el desvío plenamente documentado de 500 millones de pesos de la anterior Administración Municipal priísta, a cargo de Leticia Herrera Ale, por el cual existen denuncias y carpetas de investigación abiertas ante instancias estatales y federales.
El auditor Guevara Morales fue electo por el Congreso del Estado el 29 de mayo del 2020 y el lunes pasado renunció, según confirmó la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso local, la diputada por Morena, Sandra Amaya Rosales, quien mencionó que fue aceptada “con mucho gusto”.
Guevara fue acusado por sus trabajadores por no haberles pagado su quincena; también se investiga un subejercicio de 20 millones de pesos en su área y de haber vendido vehículos EASE sin licitación.
Tras su ruptura con los legisladores, que lo cuestionaron por malos manejos vino la renuncia.
“No nos equivocamos, el tiempo nos da la razón. No nos quedamos, no nos quedaremos callados ante actos de corrupción. En su momento, cuestionamos la aparente ceguera del auditor y que cómo podía ser posible que siendo el titular de la EASE se negara, porque se negó, a investigar el caso de Gómez Palacio, donde se perdieron nada más y nada menos que 500 millones de pesos en la pasada administración”, apuntó Castañeda.
El también aspirante a la Diputación Federal por el Distrito 02, con cabecera en Gómez Palacio, fue abordado por medios de comunicación este miércoles, ante la postura de los diputados de Morena que celebraron la salida de Guevara Morales de la EASE.
Castañeda aprovechó para enfatizar que el único señalamiento que pudo hacer el hoy ex auditor estatal, a la Administración de Marina Vitela, corresponde al préstamo bancario de 30 millones de pesos que el Municipio tuvo que pedir (y que ya saldó) para poder cubrir las prestaciones de los trabajadores, porque ni para eso les dejaron los ex funcionarios priístas.
“Pues ni eso nos dejaron, había 27 millones en caja y únicamente a los proveedores se les debían 100 millones de pesos, entonces, a todos los priístas que hoy nos critican y que tuvieron la oportunidad de haber hecho un cambio por Gómez Palacio, porque ya fueron gobierno, decirles que esos 500 millones de pesos que se perdieron en los bolsillos de alguien y que simplemente desaparecieron de la hacienda pública municipal, representan casi 8 veces el dinero ejercido en Obra Pública en el último año de la pasada Administración. Si ese dinero se hubiera aplicado correctamente, Gómez Palacio sería otro y no tendría el rezago que hoy tiene. Hoy sabemos que el auditor sí era incompetente... o palero”, finalizó.