Luego de que la demanda de la vacuna contra el Covid-19 para adolescentes torreonenses de entre 12 y 14 años de edad no fue la que se esperaba, ya que se logró aplicar apenas acerca de la mitad de las dosis que se tenían programadas, aún es posible aprovechar el material biológico que quedó disponible.
Se trata de vacunas de la farmacéutica Pfizer, una parte de las cuales se enviaron para sustentar el programa de inmunización para personas del mismo grupo de edades de los vecinos municipios de Matamoros, Viesca y Parras.
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Otra parte quedó en reserva en espera de que pueda servir para hacer efectiva la aplicación de segundas dosis para los adolescentes de Torreón que recién acudieron a recibir la inyección inicial.
Al respecto, el servidor de la Nación adscrito a la Subdelegación Regional de Programas para el Desarrollo de la Secretaría de Bienestar, Antonio Rivera, dio a conocer que durante los días del 3 al 13 de mayo se logró vacunar con su dosis inicial de la vacuna contra el Covid-19 a 20 mil 694 adolescentes de 12 a 14 años de Torreón.
Hizo notar que esa cantidad apenas se aproximó al 50 por ciento de la meta que se había establecido localmente para esta etapa de vacunación, de manera que quedaron en existencia alrededor de 20 mil dosis.
Por fortuna se trata de vacunas que cuentan todavía con un buen margen de vida útil, pues su fecha de caducidad está establecida para el próximo mes de julio, de manera que seguramente serán aprovechadas con toda oportunidad.
Cabe señalar que la segunda inmunización con el biológico de Pfizer se recomienda aplicarla después de los 21 días de la primera aplicación.
Sobre por qué la demandas de vacunación registrada entre el 3 y el 13 de mayo no fue la esperada, Antonio Ribera comentó que uno de los factores que influyó fue que los menores no podían acudir a los módulos de atención sin la compañía de sus padres, muchos de los cuales no acudieron por tener que atender sus compromisos laborales.
También influyó la falsa idea que se difundió sin sustento, en el sentido de que las vacunas que se ofertaban estaban por caducar, cuando que en realidad ese no era el caso del biológico de Pfizer sino el de AstraZeneca.