Garantizar la seguridad del público usuario y prevenir hechos de tránsito, son los objetivos centrales de la capacitación con la que anualmente deben cumplir de manera indispensable los choferes del transporte público en Torreón para poder refrendar el gafete de identificación con el que el municipio los reconoce como vigentes prestadores de un servicio público.

Es así como en el transcurso de la última semana un grupo de 38 operadores del servicio público se acercaron al Parque de Educación Vial Carlos de la Cueva para dar cumplimiento con esa obligación, para actualizar su documentación y recibir la capacitación correspondiente, informó el titular de la Dirección General de Vialidad y Movilidad Urbana, Luis Alberto Morales Cortés.

Indicó que, como seguimiento a las acciones del Municipio para reducir los hechos de tránsito mediante la reeducación vial, además de las capacitaciones, se revisó el caso de un chofer del servicio de taxi que causó un accidente, por lo que está a consideración que continúe con su licencia de transporte.

Por su parte, el director de Transporte Público Municipal, Rodrigo Muñoz Montejano, explicó que el objetivo es asegurar un servicio digno y seguro para la ciudadanía, así como verificar que los conductores acaten el reglamento, tanto al tramitar por primera vez su gafete o para el refrendo de ese documento.

Además, personal de la Dirección de Salud Pública Municipal les practica diversos exámenes de salud y toxicológicos también como requisito para continuar su trámite.

“Se revisa que los transportistas cumplan con los requisitos de seguridad al usuario, como es una prueba de antidoping, exámenes médicos y que presenten carta de no antecedentes penales, para así registrarlos en el padrón de choferes confiables”, refirió el Muñoz Montejano.

Mencionó que para que los choferes cuenten con mejores habilidades para desarrollarse en su vida laboral, reciben el adiestramiento en manejo defensivo en el Parque de Educación Vial Carlos de la Cueva.

De acuerdo con el funcionario, también que en lo que va de la Administración se han hecho solamente dos suspensiones de licencia de transporte por conducta inadecuada del chofer.

Planteó que en situaciones consideradas como graves y que vulneran la seguridad del usuario, las medidas son estrictas y resultan en una investigación que se abre en el caso necesario, donde pueden incluso retirar definitivamente la licencia de transporte o perder la concesión.

“En un uso indebido o mala práctica que pusiera en riesgo al pasajero, pueden llegar a perder la concesión a pesar de que sea el chofer quien haya cometido la falta, el propietario no queda eximido de la responsabilidad y en estos casos, el procedimiento pasa al Gobierno del Estado, a la Delegación de Transporte”, puntualizó el director.