Con una tradición de 35 años, vecinos del barrio Cañón realizan la tradicional reliquia a favor de la Virgen de Guadalupe por favores recibidos, además de continuar con la herencia que les dejaron sus abuelos.

El barrio Cañón, se localiza en la confluencia de avenida Donato Guerra y calle Allende de la colonia Centro, pero desde hace más de tres décadas se caracteriza por la devoción y fe a la Virgen de Guadalupe.

Incluso, de acuerdo a los vecinos, una de las pioneras de la reliquia y la danza fue la señora Judith Rivera Reyes, quien heredó la devoción a sus hijos y nietos.

Cabe mencionar que desde el año 1983, se inició la devoción a la Virgen de Guadalupe por los vecinos que se organizan y forman parte de la danza Barrio Cañón, la cual está conformada por 38 integrantes.

De acuerdo a datos de la Iglesia católica, hace 487 años (12 de diciembre de 1531) se registró aparición de la Virgen María, por lo que la fe de los mexicanos no sólo perdura, sino que tiene mayores alcances de devoción, oración y esperanza, y ello se comprobó ayer en las diversas iglesias, parroquias y templos católicos, en donde la feligresía acudió desde temprano a dar gracias por favores recibidos.

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Incluso, ayer en muchos puntos de Lerdo, se manifestó la devoción y fervor por la Virgen de Guadalupe por medio de las danzas y reliquias.

Para ello, los vecinos del barrio Cañón se organizaron para hacer el asado rojo y las siete sopas que se repartieron por la tarde al terminar el Rosario y recordar a sus familiares que iniciaron esta manda.